Chilpancingo, Gro. El Centro de Derechos Humanos Minerva Bello, condenó el asesinato del sacerdote Marcelo Pérez Pérez, párroco del templo de Guadalupe, en San Cristóbal de Las Casas, en el estado de Chiapas.
En un comunicado de prensa el Centro Minerva dijo que el sacerdote fue un “defensor de derechos humanos, hombre de fe que solo predicaba con el ejemplo, de la palabra del Dios de la vida, promotor de los derechos humanos y de la búsqueda de verdad y justicia de las personas que se encontraban en situación de vulnerabilidad en el estado de Chiapas.
Ante su partida, “expresamos nuestro reconocimiento por su integridad y compromiso para visibilizar las injusticias del pueblo y condenamos este hecho que termino con su vida”.
Su legado de fe “lo comprometió profundamente con la defensa de los derechos humanos, luchando por la igualdad y la justicia de los pueblos originarios, experiencias que lo llevaron a contribuir en el ámbito regional con proyección internacional”.
Su partida “es una enorme pérdida para las causas justas de los pueblos en Chiapas y de la región sur del país; sus aportes se quedan con nosotros y seguirán contribuyendo a la incansable lucha de igualdad, verdad y justicia ante las situaciones que lastiman nuestra sociedad”.
Exhortamos al Estado mexicano para que “mediante sus instituciones, investigue estos hechos lamentables que privaron de la vida a Marcelo Pérez Pérez y, este hecho no quede impune”.