En el Centro Histórico capitalino, dos centenares de criaturas fantásticas invadieron este sábado las calles y deslumbraron a una multitud de más de 630 mil personas, según cifras oficiales.
El Desfile y Concurso de Alebrijes Monumentales, organizado por el Museo de Arte Popular (MAP), ofreció una explosión de color y creatividad que dejó a los asistentes maravillados ante la magnitud de las imponentes figuras. El acto cultural arrancó desde el Zócalo, y recorrió tres kilómetros de calles, hasta el Ángel de la Independencia.
Foto Yazmín Ortega
A lo largo del trayecto, dragones, armadillos multicolores, ajolotes y felinos gigantes fueron los protagonistas. Los artesanos, con dedicación y talento, dieron vida a estos seres irreales con cartón, madera, herrería, entre otros materiales, y lograron creaciones que parecían cobrar vida con sus vibrantes colores y detalles intrincados. Las selfies y videos fueron una constante entre los asistentes, quienes estaban ansiosos por capturar la magia de estas obras de arte en movimiento.
El desfile contó con la participación de artesanos de diferentes estados del país, quienes aportaron su estilo y visión. Daniel Marcial Camacho, artesano de la alcaldía Álvaro Obregón, presentó su alebrije Cochiloco, una mezcla entre cochino, cabra y murciélago.
"El esqueleto es de herrería y lo forré con papel y engrudo", explicó sobre su proceso creativo. Marcial Camacho, quien participa desde 2008, destacó la evolución técnica que ha experimentado el acto, donde ahora se usan estructuras más sofisticadas que incluso incluyen movimiento.
Foto Yazmín Ortega
La premiación de los tres mejores alebrijes se llevará a cabo el 26 de octubre en las instalaciones del MAP (Revillagigedo 11, Colonia Centro).
Los ganadores recibirán estímulos económicos de 70 mil, 50 mil y 40 mil pesos, respectivamente. Mientras tanto, los visitantes podrán disfrutar de esta imponente exhibición a partir de hoy y hasta las 20 horas del 3 de noviembre, en las aceras norte y sur de Paseo de la Reforma (entre la Columna de la Independencia y la calle de Lieja, a unos pasos de la Estela de Luz).