Ciudad de México. Ante el inicio del nuevo gobierno que encabeza la presidenta Claudia Sheinbaum, organizaciones defensoras de los derechos de los migrantes presentaron una agenda migratoria y de asilo, con 11 ejes enfocados sobre todo a cuestiones de seguridad humana y a la garantía de los derechos de esta población.
Expusieron que si bien ha habido avances, la política de Estado “continúa caracterizándose por el control y la contención migratoria, ahora no sólo por el Instituto Nacional de Migración (INM), sino también por la Guardia Nacional (GN) y en un contexto en el que los derechos fundamentales de las personas en movilidad se ven violentados”.
En este sentido, consideraron que es “un buen guiño” que Sergio Salomón, ex gobernador de Puebla nombrado por Sheinbaum como próximo titular del INM, “no tenga un perfil militar o vinculado al tema de seguridad pública como lo tiene el actual comisionado”, Francisco Garduño.
Melissa Vértiz, del Grupo de Trabajo sobre Política Migratoria, expuso que una de las peticiones y de las recomendaciones de la agenda, “es garantizar perfiles civiles y con especialización en derechos humanos para el personal del INM”.
Ante ello, hicieron un llamado a Salomón para que dialogue con las organizaciones civiles, con el fin promover acciones concretas como los programas de regularización migratoria.
Respeto al contenido de la agenda migratoria y de asilo, Gretchen Kuhner, directora del Instituto para las Mujeres en la Migración (Imumi), destacó el tema de la construcción de una política de integración sostenible, el fortalecimiento del sistema de asilo y protección de los niños, niñas y adolescentes, así como el reconocimiento del cambio climático y desastres naturales como causa estructural e irreversible de la movilidad forzada.
Refirió que en 2023 se registraron 140 mil personas que presentaron una solicitud de asilo en México. A ellas, dijo, se suman las que están en tránsito, que no saben si permanecerán en el país o si continuarán su camino hacia Estados Unidos.
“Desde 2021 empezamos a ver estos números grandes de eventos de detención migratoria. En 2023 fueron más de 770 mil eventos de este tipo”, que tiene que ver con personas que fueron detenidas varias veces en su camino, mencionó.
En el tema de integración, Kuhner de igual manera puso el acento en lo que sucede con las personas mexicanas que son deportadas a territorio nacional, que el año pasado fueron 214 mil.
“Para todas estas poblaciones lo que necesitamos es la integración” y para ello las personas requieren un documento migratorio, como de estancias por razones humanitarias y programas de regularización.
Al respecto subrayó que este año el INM ha dejado de emitir tarjetas de visitantes por razones humanitarias “que se deberían dar a cualquier persona víctima o testigo de un delito, que son el 60 por ciento de la población; así como a niños, niñas y adolescentes y solicitantes de asilo”.
Igualmente, las personas migrantes necesitan documentos de identificación, acceso a programas sociales y de vivienda, así como a la educación, manifestó.