Ciudad de México. Este año el empleo tendrá un crecimiento de 2.1 por ciento, una previsión que depende de las expectativas crecimiento económico, “las cuales están condicionadas en gran medida a que se disipe la incertidumbre generada por las recientes reformas legislativas”, dio a conocer este miércoles BBVA, el banco de mayor presencia entre los que operan en el país.
Un análisis de la institución, con cifras tomadas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), indicó que el empleo formal creció 1.6 por ciento en septiembre, lo que equivale a 91 mil nuevos puestos de trabajo, con lo que se suman un total de 456 mil empleos creados en lo que va del año.
“No obstante, este crecimiento fue nuevamente inferior a lo esperado, lo que ha acentuado la desaceleración del empleo formal. Esta tendencia, sumada a las previsiones económicas, ha afectado las expectativas de crecimiento del empleo tanto a corto como a mediano plazo”, precisó el informe realizado por el economista senior, David Cervantes Arenillas.
Mencionó que el empleo permanente mantiene una trayectoria de crecimiento positivo a lo largo del año, lo que proporciona una relativa fortaleza al empleo formal con la creación de 458 mil nuevos puestos de trabajo, y, en contraste, el empleo eventual es afectado por la desaceleración en sectores como el agropecuario y la manufactura, por lo que se ha notado una caída de 2 mil empleos respecto al inicio del año.
“Aunque es probable que el empleo eventual repunte en los meses de octubre y noviembre por factores estacionales, no se espera que este incremento tenga un impacto significativo en el total del empleo para el cierre del año”, detalló.
Empleo por sectores
Explicó que la manufactura, uno de los principales motores del crecimiento del empleo formal, ha sufrido una marcada desaceleración y hasta septiembre ha crecido 1.8 por ciento, un nivel menor si se compara con los crecimientos que se tenían en el mismo lapso de 2023 y 2022, de 3 y 4.7 por ciento, respectivamente.
“Como este sector ha sido y sigue siendo clave para el sólido desempeño en la creación de empleo, su debilidad actual está afectando negativamente al crecimiento del empleo agregado”, planteó BBVA.
Refirió que en los demás sectores, el terciario ha demostrado ser el más resiliente en la creación de empleo durante lo que va del año, y en este contexto, el comercio tuvo en septiembre la mayor contribución al crecimiento del empleo, toda vez que aportó 0.6 puntos porcentuales al crecimiento total, y en segundo lugar, los sectores de servicios y transporte contribuyeron con 0.4 puntos porcentuales cada uno.
No obstante, expuso, resulta “preocupante” la situación del sector agropecuario, que continúa con un rezago en el empleo y ha registrado tasas de crecimiento anual negativas durante 13 meses consecutivos, una tendencia se debe en gran parte a la sequía que ha afectado especialmente a estados como Sinaloa, Sonora y Chihuahua.
La construcción, con diversos resultados
BBVA añadió que el sector de la construcción, que había mostrado una desaceleración continua pero con crecimientos positivos en el empleo, experimentó en septiembre una caída de 0.3 por ciento, el equivalente a una pérdida mensual de 16.8 mil empleos.
“Dado que este sector es altamente estacional y se ve afectado por el cierre de proyectos al final del año, no se prevé un repunte significativo en los próximos meses. Es probable que se acumulen pérdidas adicionales de empleo en lo que resta del año”, abundó.
En este sector, dijo el banco, destacan cuatro entidades por su dinámica de crecimiento y su contribución al empleo total en lo que va del año: Chiapas, Hidalgo, Estado de México y Nuevo León, mientras que desde enero hasta la fecha Tabasco ha perdido 18.5 mil empleos, en donde la caída es producto de la falta de inversiones potenciales en el corto plazo que podrían mitigar el impacto negativo dejado por la finalización de las obras de la refinería.
“Si bien esperamos que el crecimiento del empleo recupere algo de tracción en octubre y noviembre, prevemos que el empleo cierre en 2024 con un crecimiento anual de 2.1 y de 2.5 por ciento en 2025. Este crecimiento dependerá del cumplimiento de las expectativas de crecimiento económico”, concluyó BBVA.