Madrid. El día de la fiesta nacional española, el 12 de octubre, se celebró entre abucheos y silbidos al presidente del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, además de reivindicaciones del “pasado” por parte de la mayoría de los partidos políticos presentes en la ceremonia previa al desfile militar, que presidió el rey Felipe VI y que, como es habitual, no pronunció ningún discurso público. Ningún miembro del gobierno español ni de la Casa Real emitieron algún tipo de mensaje de disculpa o perdón por el genocidio durante la Conquista y la época colonial.
Con una lluvia intensa durante toda la mañana, que obligó a cancelar la parte aérea del desfile militar, el rey Felipe VI presidió los actos conmemorativos de la fiesta nacional española, en la que se rememora la llegada de Cristóbal Colón a América y el onomástico de la virgen del Pilar, la patrona del país. En las inmediaciones del palco de autoridades se congregaron miles de personas, que fueron alejadas varios centenares de metros para evitar los silbidos y los insultos que se escuchan cada año, sobre todo si gobierno un presidente de izquierda. Pero ni aún así se pudo evitar escuchar una enorme pitada tanto a la llegada como a la salida del presidente Sánchez, al que además le profirieron numeroso insultos, desde “traidor” hasta “hijo de puta”, y la acusaron de “ladrón”, en alusión a la trama de corrupción que está investigando la justicia y que afecta al que fue su mano derecha en el gobierno y en el partido, el ex ministro de Fomento y secretario de organización del PSOE, José Luis Ábalos.
Al acto público asistieron representantes de las principales instituciones del país y de las comunidades autónomas, con la excepción del País Vasco, que no suele acudir a este tipo de actos, y con la novedad de que este año sí acudió el presidente de Cataluña, el socialista Salvador Illa, que rompió así con la tradición de los anteriores gobiernos independentistas catalanes de no viajar a Madrid para estas fiestas.
Los principales líderes políticos lanzaron sus mensajes desde las redes sociales, en los que no hubo ningún gesto hacia las peticiones de perdón por los atropellos y expolios durante la Conquista, ni desde el gobierno ni desde la Casa Real ni desde los partidos de la derecha española, que éstos sí enarbolaron un mensaje reivindicativo del “orgullo” de su “pasado”. El presidente Sánchez se limitó a señalar que “España es cultura, liderazgo, compromiso, innovación, inclusión y educación."Un país es muchas cosas.
Es una forma de ser compartida por mucha gente. Por la de dentro y la de fuera. Es una forma de vivir que sabe a cultura, suena a liderazgo, a compromiso, mira a la innovación, a la inclusión, a la educación, que huele a solidaridad y cooperación, que se toca con igualdad y orgullo, con identidad y diversidad. Un país es la historia compartida. Esta es la nuestra”.
Mientras que los dos principales dirigentes de la derecha, Alberto Núñez Feijóo, del PP, y Santiago Abascal de la extrema derecha de Vox sí evocaron con “orgullo” el pasado colonial y de la Conquista. “El 12 de octubre celebramos la historia, el sentimiento y el orgullo de ser españoles y la cultura común que hemos forjado a lo largo de los años con nuestros hermanos en Hispanoamérica. Feliz día de la Fiesta Nacional y de la Hispanidad a todos”, dijo el líder del PP. Mientras que Abascal afirmó que “Hoy, con todo nuestro orgullo, celebramos la mayor obra de hermanamiento entre pueblos de la Historia universal. No hay nada por lo que pedir perdón, pero sí hay mucho que aprender y agradecer de quienes supieron superar diferencias para emprender grandes empresas. ¡Viva España! ¡Viva la Hispanidad!”.
El partido de izquierda minoritario Podemos, que actualmente tan sólo tiene cuatro diputados en el Congreso, sí habló de pedir perdón: su vocera adjunta, María Teresa Pérez, señaló que “hay que dejar de celebrar un genocidio, una invasión contra los pueblos originarios de América Latina. No es motivo de orgullo porque conmemora una invasión y un genocidio. España tendría que pedir perdón por los crímenes cometidos en el pasado y queremos anunciar que vamos a proponer formalmente que el 12 de Octubre pase a celebrarse en el 15M”. En cuanto a la petición de perdón por parte de la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, la líder español afirmó que “España se niega a hacerlo y tenemos una monarquía corrupta que es soberbia además y que está perjudicando las relaciones internacionales de nuestro país con pueblos hermanos como son esos pueblos de América Latina”.
