Cuernavaca, Mor. El titular de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SPyPC), Miguel Ángel Urrutia Lozano, reconoció que custodios, y elementos de fuerzas policiacas federales que intervinieron, disolvieron el motín que se registró la tarde-noche del pasado sábado en el Centro de Reinserción Social (Cereso), Morelos, haciendo disparos de arma de fuego; tanto, que uno de los internos murió consecuencia de “un disparo de bala”.
De acuerdo con el funcionario estatal, todo comenzó en el dormitorio B en donde están albergados reos de alta peligrosidad, puntualizando, dos causas que podrían haber iniciado esta revuelta: el cambio de la empresa proveedora de alimentos y la corrupción que existe en el interior de este centro de reclusión.
“Con base a los protocolos del sistema penitenciario federal, se tienen diversos ordenamientos como son la emisión de salva, para hacer que la población penitenciaria tenga un orden, como no se consiguió con este envió de salvas de disparos en ráfagas controladas hacia el aire, se decidió por situación de gravedad, para salvaguardar la integridad física (de los custodios).
“En ese instante se juntó suficiente personal, ya con el apoyo del ejército mexicano se entró a ese dormitorio B, en donde existe una gran cantidad de presos de alta peligrosidad, en ese instante se dio un intercambio de disparos”, dijo Urrutia, sin reconocer después sí los internos tenían armas de fuego y también dispararon a los uniformados, aunque en su primera declaración habló de un “intercambio de disparos”.
Más adelante, en la conferencia de prensa de este lunes, el funcionario estatal aceptó que el reo “sí murió por un disparo de bala, nunca se está diciendo que no hubo disparos, siempre hemos reconocido que hubo disparos al interior”, hechos que ya son investigados por la Fiscalía General del Estado (FGE).
No contestó con precisión sí los internos tenían o no armas de fuego; pero sí dijo que sí que tienen teléfonos celulares mismos que no están permitidos y desde estos aparatos, incluso, transmitieron fragmentos en vivo sobre esta rebelión. Del cien por ciento de cámaras de video-vigilancia, aseguró que sólo funciona, un 30 por ciento, y que este penal es un foco rojo, porque “existen grandes deficiencias y cobro de ingreso, telefonía al interior”.
Hasta esta mañana de lunes (7 de octubre), después del motín mencionado que dejó un muerto y tres lesionados, Urrutia confirmó la salida del Coordinador del Sistema Penitenciario del estado de Morelos, Jorge Israel Ponce de León; la directora del penal de Atlacholoaya, Lluvia Oregón y el director operativo de este Cereso, Jesús Francisco Flores Jiménez. Ambos de la pasada administración que encabezó Cuauhtémoc Blanco Bravo.
