Ciudad de México., El Sindicato Único de Trabajadores de la Universidad Autónoma de Sinaloa (Suntuas), a través de su secretario general, el maestro Samuel Jesús Castro Camacho, ha ratificado su apoyo al paro de labores convocado para el lunes 7 de octubre.
Esta acción busca defender la autonomía universitaria, la cual ha sido vulnerada, según el sindicato, por decisiones del Congreso Local y del Gobierno de Sinaloa. La comunidad universitaria se prepara para suspender actividades en respuesta a lo que consideran una intervención ilegítima en la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS).
El Comité Ejecutivo del Suntuas señaló que las medidas adoptadas por las autoridades locales, en particular la aprobación y publicación de la Ley de Educación Superior del Estado de Sinaloa, son un ataque directo a la estabilidad académica y laboral de la institución.
Esta ley, recientemente declarada inconstitucional en varios de sus artículos por tribunales federales, atenta contra derechos fundamentales consagrados en la Constitución, afectando áreas como el financiamiento universitario, la libertad de oferta educativa y los procesos de contratación y promoción del personal.
Desde febrero de 2023, el conflicto se ha intensificado. A pesar de que los tribunales han emitido resoluciones en favor de la UAS, el sindicato denuncia que las autoridades estatales han mantenido una postura de hostigamiento.
Ejemplo de ello fue la destitución del doctor Robespierre Lizárraga Otero, quien hasta hace poco fungía como Encargado del Despacho de Rectoría. Esta decisión dejó a la universidad en una situación de incertidumbre administrativa y afectó gravemente su operación cotidiana.
El Suntuas ha calificado estas acciones como parte de una estrategia de persecución política que trasciende el ámbito académico, poniendo en riesgo la consolidación de una de las instituciones educativas más importantes del noroeste de México.
En su posicionamiento, el sindicato advirtió que intereses ajenos a la educación pretenden socavar el desarrollo de la universidad, afectando su papel en la formación de las nuevas generaciones y en la estabilidad social de Sinaloa.
Por su parte, el sindicato subrayó que su deber principal es proteger los derechos laborales de los trabajadores universitarios y rechazar cualquier intento de represión en su contra. En este sentido, hicieron un llamado al diálogo, insistiendo en que debe primar la legalidad y el respeto mutuo para superar la crisis.
En este contexto, el Suntuas se mantiene firme en su postura de resistencia, convocando a todos los trabajadores y estudiantes a unirse en defensa de la autonomía universitaria. Además, recalcaron que, con el apoyo de la sociedad sinaloense y diversas organizaciones a nivel nacional e internacional, confían en que la universidad saldrá fortalecida de esta adversidad.