Ciudad de México. Integrantes de la comunidad otomí residente en la Ciudad de México, que desde hace cuatro años mantienen tomadas las instalaciones del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (Inpi) en la colonia Xoco, hicieron un llamado a la presidenta Claudia Sheinbaum; a la jefa de Gobierno capitalino electa, Clara Brugada, y al próximo secretario de Vivienda, Inti Muñoz, a establecer una mesa de diálogo para resolver sus demandas.
“Nuestra lucha es por el agua, la vida y el territorio”, manifestaron en un pronunciamiento en el marco del nuevo gobierno federal y en víspera de que tome posesión la jefa de Gobierno, Clara Brugada, y concluya la actual administración capitalina, encabezada por Martí Batres.
Lamentaron que a cuatro años de la toma del Inpi no hayan sido atendidas sus peticiones sobre vivienda, trabajo, educación, salud y alimentación. Asimismo, reprocharon que las autoridades no cumplieran su palabra tras algunos intentos de negociación.
“Seguimos en resistencia y rebeldía”, aseveraron, en la autonombrada Casa de los Pueblos y las Comunidades Indígenas ‘Samir Flores Soberanes’.
El 12 de octubre del 2020, en el marco de una jornada nacional “de movilización en defensa de la madre tierra”, integrantes de la comunidad otomí residente en la Ciudad de México y de Santiago Mexquititlán, Amealco Querétaro, entre otros, tomaron las oficinas centrales del Inpi al destacar que como hace más de 500 años, desde la llegada de los europeos al continente americano, los pueblos indígenas siguen enfrentando el despojo, la discriminación, el racismo y el desplazamiento.