Washington. Estados Unidos informó este domingo que mantiene una fuerte presencia militar en Oriente Medio después de desplegar refuerzos en medio de temores de una escalada vinculada a los ataques de Israel contra cientos de objetivos en Líbano.
"Ya tenemos una capacidad militar muy robusta para defendernos y para ayudar a Israel a defenderse", afirmó en una entrevista con ABC el vocero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, agregando que se desplegaron más fuerzas desde que Irán lanzó cientos de cohetes y drones contra Israel en abril.
En un comunicado, el Pentágono declaró el domingo que se ordenó a un portaviones y a una unidad de expedición de la Marina que continúen operando en el Mediterráneo este y que estas fuerzas estaban respaldadas por una "elevada presencia" de aviones de guerra.
Estados Unidos "reforzará aún más (sus) capacidades defensivas de soporte aéreo en los próximos días", aseguró el portavoz del Departamento de Defensa, el mayor general Pat Ryder.
Kirby reiteró la preocupación de su país por la ampliación del conflicto en Oriente Medio, pero también el "derecho de Israel" a "eliminar la amenaza a su pueblo y a su territorio", en alusión al Hezbollah.
"Casi desde el principio del conflicto hemos estado preocupados de que se convirtiera en una guerra regional", comentó.
Los temores aumentaron ante la posibilidad de que Israel lance una incursión terrestre en Líbano, capitalizando el momento y el apoyo de Estados Unidos tras abatir al líder de Hezbolah Hasán Nasralá y otras figuras del grupo armado.
A pesar de la atmósfera de crisis, Kirby expresó que Estados Unidos no tiene planes inminentes de evacuar a sus ciudadanos de Líbano, pero reiteró el llamado a que abandonen ese país mientras puedan.
El portavoz dijo que era muy pronto para decir quién asumirá el liderazgo del Hezbollah después de que Nasralá fuese asesinado el viernes en un bombardeo israelí en Beirut.