Santo Domingo. El torpedero de los Rays de Tampa Bay Wander Franco tendrá que afrontar un juicio por abuso sexual contra una menor de edad, dictó un juez en la República Dominicana.
Después de más de un año de investigación, el juez Pascual Valenzuela en la norteña provincia de Puerto Plata falló que las pruebas presentadas por la Fiscalía ameritan un juicio de fondo. No se pautó una fecha para el juicio, a cargo de un panel de magistrados. No existe el juicio por jurado en la República Dominicana.
La madre de la menor, acusada de comercializar a su hija y ser cómplice de Franco, también pasa a la siguiente etapa, donde serían condenados o descargados.
El acusado, quien ha rehusado hablar con la prensa sobre el tema, repitió la frase “todo está en las manos de Dios” al salir de la audiencia que duró más de cinco horas.
“Se envió, como era de esperarlo a juicio de fondo”, dijo el abogado del beisbolista , Teodosio Jáquez tras la audiencia.
Los fiscales dijeron que la decisión del juez valida la contundencia de las pruebas. “Entendemos que es una acusación firme y el tribunal así lo entendió. Las pruebas presentadas por el Ministerio Público vinculan estrechamente a los acusados con la tipología descrita en la acusación”, dijo el fiscal Claudio Cordero.
Franco, quien fue puesto en licencia administrativa por las Grandes Ligas en mayo, llegó cabizbajo al juzgado a las 9 de la mañana, y se mantuvo callado durante la audiencia escuchando la defensa de sus abogados y los argumentos de los fiscales.
De acuerdo con los fiscales, Wander pagó miles de dólares a la madre de la menor para que consintiera la relación, que duró cuatro meses. Durante los allanamientos a la casa de la madre de la menor, los fiscales dicen que encontraron 68 mil 500 dólares y 35 mil dólares que presuntamente fueron entregados por Franco.
Los cargos más graves que el acusado estará enfrentando son los de violación sexual a una menor, por el cual podría recibir condenas de entre 10 a 15 años de prisión y el de trata de personas, el cual es castigado en República Dominicana con penas de entre 15 y 20 años. El proceso se ha realizado en Puerto Plata, de donde es la víctima, y donde ocurrieron los hechos.