Jilotzingo, Méx., Un total 12 de personas, entre ellas nueve fallecidas y tres con vida, fueron rescatadas entre sábado y lunes de los escombros de sus viviendas, tras el desgajamiento del cerro del poblado de San Luis Ayucan, donde se ordenó la evacuación de 60 casas para valorar las condiciones de seguridad en suelo de la zona cerril, en tanto, este lunes con la extracción de los últimos 5 cuerpos realizada concluye la etapa de salvamento e inicia la remoción de escombros.

“El último cuerpo que se extrajo del total de cinco recuperados, este lunes, fue el de un joven de al menos 16 años, y con ello concluyen las labores de rescate en la zona cero”, planteó el coordinador General de Protección Civil y Gestión Integral del Riesgo del Estado de México, Adrián Hernández Romero, quien comentó que ahora inicia la etapa de recuperación para la zona donde el viernes por la tarde-noche, ocurrió el desgajamiento.

Hernández Romero en entrevista, resumió, que entre sábado y lunes fueron rescatadas 12 personas, de ellas 9 fallecidas y tres con vida. Detalló que el sábado fueron encontradas cuatro personas; el domingo, tres y el lunes cinco, en este último caso, se trató de una mujer de al menos 35 años, dos menores de 14 y 16 años, y dos hombres de 52 y 16 años aproximadamente.

Agregó que  el personal de distintas corporaciones continúa con la limpieza de caminos y la carretera principal afectada por deslaves. Toneladas de tierra, árboles, piedras y lodo son retirados de la cinta asfaltuca. En tanto, la Unidad de Protección Civil municipal atiende a otras comunidades afectadas por las lluvias en la región como Santa María Mazatla y Las Manzanas, donde pudieran haber dos personas reportadas como desaparecidas, pero durante labores de búsqueda con el apoyo de binomios caninos, no se han localizado, comentó el funcionario.

Este lunes a la zona del desatre, entraron dos maquinas de trascabo que iniciaron el retiro de escombros, lozas, muros, restos de materiales despedazados de lo que fueron negocios y casas, así como autos que estaban estacionados en la pequeña zona de comercios, los cuales quedaron aplastados y con la maquinaria pesada fueron levantados y llevados a camiones de carga, utilizados para retirar los escombros. 

Al menos 60 viviendas permanecen evacuadas. El martes de esta semana, investigadores de Geología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNM) y de la dirección General de Protección Civil y Gestión Integral del Riesgo, inicia recorridos de evaluación para determinar si hay que desalojar más casas o si la gente ya puede regresar a sus domicilios, comentó el funcionario.

La Secretaría de Salud estatal instaló cuatro módulos de atención médica y psicológica: Centro Especializado de Atención Primaria a la Salud (CEAPS) de San Luis Ayucan; Centro de Mando, y dos unidades médicas móviles en el Barrio Dangú; además de la activación de la red hospitalaria de la región y cinco Caravanas de Salud.

Hasta este lunes, en la zona de desastre permanece personal de las Secretarías de la Defensa Nacional (Sedena), de Marina (Semar); Guardia Nacional (GN); Secretarías estatales: General de Gobierno, de Seguridad, de Salud, del Agua y de Movilidad; y la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM).

Así como de Protección Civil nacional, estatal y municipal; Compañía Federal de Electricidad (CF); Cruz Roja Mexicana; Servicio de Urgencias del Estado de México (SUEM); Policía estatal y municipal; la Comisión del Agua del Estado de México; y la Junta de Caminos estatal. 

Miedo de nuevos derrumbes

“Oí que decían auxilio, y cuando salí vi el agua se estaba llevando a una señora de edad y a una jovencita, y un niño y un señor estaban atrapados dentro de un auto que estaba destruido, todo se hizo un lodazal, había piedras, troncos y materiales de casas destruidas en segundos”, narró Rosa Patricia Trejo Covarrubias, quien trabajaba en un negocio cercano al momento del desgajamiento.

Rosa Patricia narra que junto con varias personas corrió a auxiliar a personas atrapadas en una pequeña Plaza comercial, que recibió el alud ocurrido el viernes por la tarde noche, y narra que aguas torrenciales no dejaron salvar a más personas que quedaron atrapadas en la zona de desastre.

Además de 16 casas afectadas, el desgajamiento se llevó una placita de negocios, donde una cocina de comida, un bar, una lavandería, miscelánea, una farmacia, dos locales de negocios, fueron destruidos por la avalancha de materiales que bajaron del cerro.

El pueblo de San Luis Ayucan sabe qué hace 30 años esa zona era parte de una barranca que descendía del cerro, “era una zona de riesgo y ahí construyeron, el agua buscó su salida y bajó por aquí”, narró Rosa Patriciam, quien trabaja como franelera frente a un negocio de la zona del derrumbe.

Macrina Hernández, madre de cinco hijos, comenta que cuando amaneció el sábado, la casa de su vecina desapareció de su lugar. Comenta que en el Barrio Encido, otro punto del desgajamiento, la familia de su vecina pernoctó entre los escombros y veían como pasaban escurrimientos del cerro en donde estaba su casa.

El sábado en el templo de San Luis Ayucan fue velado el cuerpo de la niña de tres meses de nacida, que fue rescatada por su abuelo. En tanto, este lunes familias alistaban la sepultura de ocho fallecidos más. El sacerdote Salvador Martínez Parra comentó que la iglesia católica ofreció a sus feligreses en desgracia, usen el templo para velar a sus muertos y para misas exequias.

El sábado en este templo fue velada la niña de tres años. En tanto, familias esperaban este lunes la entrega de los cuerpos de sus fallecidos que hasta antes de las dos de la tarde permanecían en el Servicio Médico Forense de la región.

Hasta este lunes las donaciones siguen llegando a los centros de acopio, principalmente alimentos, botellas de agua, ropa. Además, se instaló un refugio en los salones parroquiales donde se alojan a más de 63 personas, familias completas, donde se les da alimento y un lugar donde pasar la noche.

“Jilotzingo está de luto”, expuso la alcaldesa de Jiloztingo, Ana Teresa Casas González, quien agradeció el apoyo y presencia de la gobernadora del Estado de México, Delfina Gómez Álvarez, y de los equipos de rescate que se sumaron a la ayuda de esta demarcación, donde un este lunes alista el sepelio de sus fallecidos.

Con la bandera a media asta, Jilotzingo rememoró el 15 Septiembre. Casas González en un mensaje a la población, planteó que no era una noche de celebración, y con el lábaro patrio a media asta, el municipio rindió honor a los habitantes fallecidos y reconoció en el personal de rescate su heroico desempeño.