El posicionamiento de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, en favor de la reforma al Poder Judicial, fue central para que el Congreso de la Unión aprobara la enmienda, aseveró el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Sin ella no hubiese sido posible”, enfatizó el mandatario en la mañanera de este jueves en Palacio Nacional.
También destacó que es gracias a la ciudadanía, que con su voto le dio la mayoría calificada en el Congreso a Morena y sus aliados —el llamado movimiento de transformación— que se podrá modificar la Constitución para regresarle el espíritu de 1917.
El jefe del Ejecutivo agradeció además a los legisladores que “defendieron” la iniciativa de reforma que envió el pasado 5 de febrero, junto a otras 19, y “sin dejarse comprar ni intimidar” la aprobaron tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado.
“Les quiero comentar que como un equipo, y es una hermandad, yo voy a retirarme peto tuvo mucho que ver, mucho, mucho, mucho que ver, la actitud y la participación respetuosa desde luego, pero el posicionamiento de la presidenta (electa), porque sin ella no hubiese sido posible.
“Ella, desde luego todos los legisladores… bueno, antes que nadie el pueblo. Porque como entendieron de que era importante tener mayoría calificada, como sabía la gente, que no era nada más ganar, sino ganar en buena lid y con ventaja, porque eso iba a permitir que se pudiese modificar la Constitución, porque la Constitución de ahora, la Constitución vigente ya no es en el espíritu y en la letra lo que fue la Constitución original de 1917”, subrayó.
El tabasqueño reseñó que ayer tenía una reunión privada agendada con los senadores que aprobaron la reforma, donde les daría las gracias por hacerlo, pero que de último momento se suspendió para cular el fondo y la forma y con ello evitar que los opositores continúen con su campaña que con esta enmienda se terminó la república e iniciará la dictadura.
“Quiero mandarles a todas, a todos (los legisladores), un abrazo fraterno, cariñoso, agradecerles mucho porque defendieron la iniciativa que envió el Ejecutivo, lo hicieron con principios y con firmeza, sin titubeos, no se dejaron comprar ni intimidar, y sabían que se estaba luchando por una causa justa. A todas y a todos les agradezco, por su comportamiento”.
Afirmó que antes de terminar su mandato —el 30 de septiembre— recibirá a los senadores. “Y en una de esas hasta desayunamos, comemos una buena barbacoa, ya sea del estado de México, de Texcoco; de Hidalgo; de Milpa Alta. Algo para celebrar con ellos”.
Sin embargo, cuando lo reflexionó mejor hizo una pausa: “Lo voy a pensar ,porque lo tendría que hacer con los diputados y son muchos. Pero mi agradecimiento muy fraterno”.
Ante los argumentos expuestos por los opositores contra una reforma constitucional, resaltó que en 36 años del periodo neoliberal se hicieron 430 reformas a la carta magna, y todas para “quitarle so carácter popular, sin favorecer a la justicia social, (por el contrario) para convertir lo público en privado, para ajustar el marco jurídico a los intereses de una minoría rapaz”.
En su sexenio, dijo, sumada la reforma judicial, suman 64. “Todavía hacen falta algunas reformas. Era una paliza, hablando en términos de beisbol”.