Mazatlán, Sin. Culiacán amaneció ayer de nuevo bajo el asedio de la violencia criminal. Enfrentamientos entre civiles armados y fuerzas de seguridad federales en el sector La Campiña y la sindicatura de Costa Rica dejaron dos muertos –un elemento del Ejército Mexicano y un civil–; dos heridos, incluido un soldado, un detenido y 12 vehículos asegurados, según autoridades estatales.
A consecuencia de las refriegas armadas, que comenzaron alrededor de las 6 de la mañana, se suspendieron las labores educativas en los municipios de Culiacán, Elota y Navolato, mientras la Universidad Autónoma de Sinaloa canceló las clases en el turno vespertino.
En el sur de la capital del estado, sobre la carretera México 15, civiles armados se enfrentaron con efectivos castrenses y luego de concluir esta escaramuza una persona fue localizada sin vida, tres vehículos baleados y uno con rastros de sangre en una de sus puertas. Además, se detectaron a lo largo de la vialidad más de cien casquillos percutidos.
Medios locales reportaron que las fuerzas armadas y la Policía Estatal Preventiva confiscaron en Costa Rica automotores de lujo baleados, abandonados entre el acceso principal de la localidad, una gasolinera y una tienda de conveniencia. Entre esas unidades destacaron camionetas Jeep Cherokee, Cadillac, Acura, Denali, Toyota, GMC y una Jeep Rubicon.
El secretario de Seguridad Pública estatal, Gerardo Mérida Sánchez, confirmó que decomisaron en Costa Rica 10 vehículos, uno de ellos blindado, y dos en Culiacán, que fueron puestos a disposición de las autoridades al igual que una persona aprehendida.
Poco antes de las 17 horas, integrantes de la Guardia Nacional (GN) y sicarios sostuvieron una reyerta en la carretera conocida como La 20, en la sindicatura de Costa Rica, lo que obligó a empleados de negocios cercanos a resguardarse, entre ellos los de la empresa avícola Bachoco.
En el lugar fue hallada una camioneta de redilas blindada, del tipo que grupos civiles armados utilizan para movilizar a sus integrantes o para montar rifles de calibre antiaéreo, que tenía impactos de bala.
Rocha Moya: la ciudad está tranquila, medios exageran
Luego de que concluyeron las balaceras de la mañana, el gobernador Rubén Rocha Moya sostuvo en conferencia que Culiacán está tranquilo
; reprochó que los medios exageran demasiado
; no obstante, pidió a la población no salir a las calles, por precaución
.
El mandatario morenista informó que alrededor de las 6 de la mañana, cuando elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) realizaban labores de seguridad pública en la colonia La Campiña de Culiacán, autoridades policiacas recibieron reportes de que grupos armados recorrían el sector. Entonces inició una refriega que continuó a las afueras de Culiacán y siguió hasta el sur de la sindicatura de Costa Rica.
Rocha Moya aseguró que después de los sucesos violentos se restableció la tranquilidad; un helicóptero sobrevoló la zona y confirmó que ya no había en ella civiles armados. Además, elementos de la Sedena, de la GN, al igual que policías estatales y municipales, implementaron operativos de vigilancia.
El gobernador solicitó a la ciudadanía ignorar información que circulara en redes y no proviniera de canales oficiales; igualmente, recriminó la actitud de empresarios del transporte público que se negaron a dar servicio, e incluso dijo saber que algunos choferes bajaron a pasajeros de sus unidades. Argumentó que las situaciones violentas se focalizaron en una zona, no en todo el municipio capitalino.
También refirió que algunos dueños de establecimientos comerciales cerraron sus locales. Comentó que si bien nadie los obligaba a mantener sus negocios abiertos, estamos tranquilos y todo fue controlado
, según le informaron el comandante de la Novena Zona Militar, Porfirio Fuentes, y el secretario de Seguridad Pública estatal, Gerardo Mérida.
Casi al mediodía, el titular de la Secretaría de Salud sinaloense, Cuitláhuac González Galindo, confirmó que uno de los dos militares que resultaron heridos falleció mientras recibía atención en el Hospital Regional del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado.
Detalló que el finado, de 42 años, recibió una bala en el rostro y fue intervenido quirúrgicamente, pero no resistió y pereció. Agregó que el otro elemento castrense padeció una lesión en una extremidad pélvica
, fue operado y seguía recibiendo atención en el mismo hospital.
Tras la captura de Ismael El Mayo Zambada, líder del cártel de Sinaloa, a finales de julio pasado, cientos de elementos militares han sido desplegados para reforzar la seguridad en Sinaloa. Rubén Rocha ha anunciado la llegada de más refuerzos, aunque no especificó cifras.