Luego de una exitosa participación en los Juegos Paralímpicos de París 2024, Ángel de Jesús Camacho regresó a México con tres medallas colgadas en el pecho y una petición a la próxima administración de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade).

Ojalá le den más apoyo al deporte adaptado, no quiero hablar mucho de ese tema pero sólo pude asistir a una competencia de preparación y un campamento. No sé si fue por falta de recursos u otra razón, compartió el nadador, quien se convirtió en el máximo ganador de la delegación nacional.

Arropado por decenas de personas que se dieron cita en el aeropuerto, Camacho realizó un llamado a las autoridades deportivas.

La verdad no se me hace justa la preparación que tuve, en realidad fue muy poca pero me sacó adelante mi mentalidad a la hora de presentarme en la alberca. Hay apoyo, pero poco, ojalá las cosas cambien.

La carrera de Camacho, de apenas 19 años, va en ascenso. En Tokio 2020 obtuvo bronce y ayer regresó a casa con una plata y dos bronces.

Mis padres fueron los que fomentaron en mí una personalidad competitiva y eso fue fundamental. Me siento muy feliz por lo que conseguí y más que animado para iniciar un nuevo ciclo rumbo a los Juegos de Los Ángeles 2028, añadió.

José de Jesús Castillo, bronce en powerlifting, secundó la petición.

Yo le pediría a quien llegue a la Conade que voltee a ver al deporte paralímpico. Nuestros compañeros convencionales hicieron un gran esfuerzo pero somos nosotros los que trajimos las medallas.

Castillo regresó al podio después de ocho años luego de hacerlo en la justa veraniega de Río de Janeiro 2016.

La medalla se la dedico a mi hijo. Esta semana cumple los seis años y creo que es un gran regalo. Disfruté mucho estos Juegos porque a diferencia de Tokio, sí hubo mucha gente, incluyendo mexicanos por todos lados.

El seleccionado espera poner punto final a su carrera dentro de cuatro años.

Creo que Los Ángeles podría marcar el final de mi carrera. Debemos trabajar mucho más porque hay un relevo generacional muy fuerte.

También regresó a México José Alberto Gutiérrez, bronce a sus 17 años, en los 400 metros estilo libre, entre otros.

Al aeropuerto llegaron decenas de personas con flores, carteles y regalos para los medallistas, quienes dedicaron algunos minutos para tomarse la tradicional selfi.

La delegación paralímpica logró 17 medallas en París, cinco menos que en Tokio 2020.

Los podios parisinos apenas superaron las 15 preseas logradas en Río 2016 y están por debajo de las cosechas de Sídney 2000, Atenas 2004, Pekín 2008 y Londres 2012.

Ganar medallas se ha vuelto mucho más complicado. Tenemos que prepararnos mejor y aplicar las nuevas tecnologías a nuestros entrenamientos, opinó Castillo.

El cambio generacional que se realiza en el deporte de alto rendimiento paralímpico se vio reflejado en la cosecha de preseas que, aunque menor que en Tokio, resulta esperanzadora para quienes nos representan a nivel internacional.

A excepción del 3 de septiembre, todos los días se ganó una medalla, eso es esperanzador, opinó en un comunicado la titular del Comité Paralímpico Mexicano, Liliana Suárez.

México participa en los Juegos Paralímpicos desde Heidelberg 1972 cuando no logró presea. Desde Toronto 1976 siempre ha estado en el podio. Contando el número de medallas en las 12 ediciones con metal, París es la cuarta peor actuación.

En este ciclo, la Conade ha invertido un promedio de 50 millones de pesos en el deporte paralímpico distribuidos en premios económicos y becas.