Saúl “Canelo” Álvarez eligió al casi desconocido Édgar Berlanga porque quiere revivir la histórica rivalidad entre el boxeo mexicano y el puertorriqueño. Apela a esa memoria llena de prestigio y está convencido que puede escribir un nuevo capítulo para agregarlo a una tradición cuando se enfrenten el 14 de septiembre en la Arena T-Mobile de Las Vegas.

El campeón indiscutido en la división de los supermedianos pretende emular los episodios de esta rivalidad que protagonizaron peleadores como Salvador Sánchez contra Wilfredo Gómez y de este contra Carlos Zárate y Lupe Pintor. Sin olvidar uno de los momentos imborrables con Julio César Chávez ante Héctor “Macho” Camacho”.

“Esa fue la razón por la que elegí a Berlanga, porque es un honor representar a mi país en una rivalidad México y Puerto Rico que ha dado peleas muy interesantes”, responde Canelo en una llamada desde Estados Unidos.

“Berlanga es un peleador fuerte y joven, viene con mucha hambre y como vimos en mi pelea anterior con Jaime Munguía, eso lo puede hacer todavía más interesante”.

El presidente del Consejo Mundial de Boxeo, Mauricio Sulaimán sostuvo que no se puede minimizar a Berlanga por no ser tan conocido. Y recordó que la historia del boxeo está repleta de momentos en los que un anónimo retador sorprendió al favorito de la noche.

Pero qué gana una superestrella como Canelo al enfrentar a un casi anónimo Berlanga, quien marcha invicto y que ganó 15 de sus 17 nocauts en el primer asalto, Sulaimán respondió:

“Además de que ganará mucho dinero, cada que un peleador sube al cuadrilátero las posibilidades son infinitas, y la nacionalidad sí tiene que ver en la calidad del boxeo. Eso es suficiente para que sea un combate muy atractivo”.

Esta tarde, Canelo hizo la llegada oficial a Las Vegas previo a su pelea del sábado próximo.