Ciudad de México., A unas semanas del cierre del sexenio, distintos indicadores que dan cuenta del avance en el combate a la corrupción no se han modificado como el gobierno había estimado al inicio de la administración y muestran que lo alcanzado aun está lejos de las metas en la materia que se había propuesto para este año el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En el informe Avance y resultados enero 2023 - julio de 2024 del Programa Nacional de Combate a la Corrupción y la Impunidad, y de Mejora de la Gestión Pública 2019-2024, recién publicado por las Secretarías de la Función Pública (SFP) y de Hacienda (SHCP) señala que el número de víctimas de actos de corrupción en la realización de trámites públicos bajó apenas un 5 por ciento entre 2017 y 2023, cuando la meta es una reducción del 52 por ciento; se ha logrado bajar la percepción que la población tiene de la incidencia de la corrupción en la administración federal en un 28 por ciento, pero la meta es una caída del 50 por ciento; otro objetivo es que baje a la mitad la ocurrencia de actos de corrupción resultado de la interacción de servidores públicos, pero ha disminuido solo un 0.57 por ciento.
En el apartado dedicado al objetivo prioritario 1: Combatir frontalmente las causas y efectos de la corrupción, el reporte apunta que la meta del gobierno para 2024 es bajar el número de víctimas de actos de corrupción en trámites públicos en más de 52 por ciento y que pase de 14 mil 645 por cada cien mil habitantes en 2017 a 7 mil 26.
Los datos de la SFP señalan que este indicador tuvo un repunte en el primer año del gobierno de López Obrador, cuando llegó a 15 mil 732 víctimas, pero luego de eso ha venido a la baja, al pasar en 2021 a 14 mil 701.
En tanto, para 2023, el último año con datos disponibles, la cifra llegó a 13 mil 966, lo que representa una disminución de solo cinco puntos porcentuales respecto a 2017.
En la sección dedicada a la percepción sobre la frecuencia de la corrupción en el gobierno federal, el informe consigna que el objetivo gubernamental es que este indicador pase de 86.5 puntos registrados en 2017 a 43.3 en 2024, es decir, una baja del 50 por ciento en la proporción de las personas mayores de 18 años que opinan que los actos de corrupción en la administración federal son frecuentes o muy frecuentes, según mediciones del INEGI.
El indicador ha ido a la baja durante el gobierno de López Obrador, al pasar a 66.2 puntos en 2019, a 65.5 en 2021 y a 61.6 en 2023, pero lejos todavía del objetivo sexenal.
En lo que toca al parámetro que mide la ocurrencia de actos de corrupción, se consumen o no, como resultado de la interacción entre los servidores públicos y la población mayor de 18 años, el reporte señala que la meta es llegar en 2024 a 12 mil 770 casos anuales por cada cien mil habitantes y con ello conseguir un decremento del 50 por ciento respecto a lo observado en 2017, cuando se registraron 25 mil 541 casos.
Este indicador prácticamente no se ha movido, pues en 2023 se reportaron 25 mil 394 casos, es decir, una baja de apenas el 0.57 por ciento.
