En la “jornada por los derechos político electorales”, la magistrada Janine Otálora Malassis llamó a defender la autonomía del Poder Judicial, el cual impide que los derechos de la ciudadanía dependan de las agendas de quienes ostentan el poder.

“Tenemos que seguir respaldando esta autonomía, esta independencia de los tribunales electorales locales y en general de cualquier tribunal para defender justamente los derechos de las minorías y garantizar un equilibrio entre la voz de la mayoría y la voz de las minorías”, señaló.

Frente a autoridades electorales, académicos y personas de grupos históricamente excluidas que asistieron en el foro dedicado a la Defensoría Pública Electoral, la magistrada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) dijo que ante intentos de afectar la división de poderes “todos debemos mantenernos firmes en esta convicción de que absolutamente toda la sociedad y todos los grupos que la componen tengan una representación en los órganos que finalmente diseñan las políticas públicas en el ámbito local y en el federal”.

Otálora Malassis se ha identificado en meses recientes por emitir votos disidentes, ya sea acompañada de Reyes Rodríguez o en solitario, como cuando votó en contra de los procesos internos de los partidos – de donde surgieron las candidatas presidenciales- al considerarlos una simulación o fraude a la ley, y también como única que se pronunció en contra la asignación de diputados de representación proporcional que dio la mayoría calificada a Morena y aliados.

Igualmente es la única – entre los cinco magistrados que integran actualmente el Pleno de la Sala Superior del TEPJF- en señalar que no continuará en el cargo, pese a que la reforma judicial en curso prevé que pueden quedarse hasta el 2027.

Hasta el momento, las actividades del TEPJF, tanto las Salas Regionales como la Sala Superior, transcurren con normalidad, aun cuando en otros ámbitos de este mismo sector hay paros parciales de labores.

Este viernes, la magistrada Otálora señaló en Guanajuato que la división de poderes permite mantener “el delicado equilibrio entre las decisiones mayoritarias y las garantías de las minorías.

Comentó que las sentencias del Tribunal Electoral en materia de acciones afirmativas demuestran que nuestro sistema de pesos y contrapesos previene el abuso de poder, particularmente de los partidos políticos en el tema de las candidaturas, y protege además los derechos de poblaciones que llevan siglos siendo discriminadas.

Señaló que la justicia electoral no pude ser un privilegio que solo beneficie a un grupo reducido de personas.

En la pasada elección del 2 de junio, dijo, gracias a la intervención de la Defensoría Publica Electoral pudieron votar más de 26 mil personas que se encontraban en prisión preventiva; además, el TEPJF subió a 13 los distritos en los que la contienda debe ser exclusivamente entre candidaturas indígenas. En conjunto, 70 diputados de la actual legislatura pertenecen a grupos históricamente excluidos.