Un creciente incendio forestal en el norte de California obligó a cientos de personas a evacuar el miércoles mientras una ola de calor amenazaba con empeorar las condiciones. En la región centro-norte de Estados Unidos, otro incendio tenía en alerta a los residentes de la segunda ciudad más poblada de Dakota del Sur, que ya están listos para evacuar si las llamas se acercan demasiado.

El incendio forestal en la lejana comunidad montañosa de California, Sierra Brooks, que cuenta con unos 500 habitantes, no estaba contenido. Las autoridades ampliaron las órdenes de evacuación el martes por la tarde luego de que fuertes vientos enviaron las llamas a través de la maleza y la madera seca a unos 80 kilómetros (50 millas) al norte de Lago Tahoe. El incendio Bear creció hasta abarcar más de 12.1 kilómetros cuadrados (4.7 millas cuadradas) y envió una columna de humo que era visible hasta a 40 kilómetros (25 millas) de distancia en Reno, Nevada.

En California, se emitieron alertas por un alto riesgo de incendio forestal. Las comunidades desérticas de Palm Springs, Twentynine Palms, Needles y Barstow también registrarán altas temperaturas con hasta 47.7 grados Celsius (118 grados Fahrenheit) pronosticados para finales de la semana en Frunace Creek, en el Valle de la Muerte.

En el condado de Santa Bárbara, las autoridades emitieron una alerta de salud debido a las altas temperaturas en zonas del interior. El Departamento de Salud exhortó a los residentes a permanecer en espacios cerrados durante el día y tomar otras medidas para evitar enfermedades relacionadas con el calor.

Las noticias de los incendios eran más positivas en Dakota del Sur: La lucha por contener un incendio se vio impulsada el miércoles por un clima más frío y vientos más suaves. Los funcionarios eran optimistas de que las viviendas de Rapid City iban a estar a salvo.

El incendio fue reportado el lunes a unos kilómetros de Rapid City, una comunidad de 80 mil residentes cercana al Bosque Nacional de Black Hills. El Memorial Nacional del Monte Rushmore se encuentra a unos 40 kilómetros (25 millas) de distancia, pero lejos del peligro.

El incendio que ardía sobre aproximadamente 65 hectáreas (160 acres) fue avivado por un clima inusualmente caliente y seco —la temperatura máxima el martes en Rapid City fue de 35.6 grados Celsius (96 grados Fahrenheit), muy superior a la temperatura habitual para principios de septiembre de 23.9 grados Celsius (75 grados Fahrenheit). Las ráfagas de viento alcanzaron los 72 kilómetros por hora (45 millas por hora).

El martes por la noche, los residentes de una zona bajo alerta de evacuación en Rapid City recibieron la instrucción de empacar, tomar sus pertenencias vitales y estar listos para partir.

Para el miércoles temprano, la temperatura era mucho más fresca, los vientos habían disminuido y el aire era más húmedo.

“Los bomberos consiguieron un buen manejo del incendio forestal anoche”, dijo una actualización del Departamento de Bomberos del condado de Pennington. “Actualmente está en 63 hectáreas (157 acres). Las condiciones meteorológicas son muy favorables hoy. Están limpiando una gran parte en el lado oeste y esperan tener todo contenido y bajo control hoy”.