Aprovechando la presencia de miles de personas en el Zócalo capitalino, durante su Sexto Informe de Gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador sometió este domingo a votación de los ciudadanos, a mano alzada, si quieren que los jueces, magistrados y ministros del país sean electos por el voto popular, que es uno de los planteamientos centrales de la reforma al Poder Judicial de la Federación (PJF) que propuso al Congreso de la Unión el 5 de febrero pasado.

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“Esto ayuda a entender cuál es el sentimiento del pueblo y también para que lo internalicen nuestros vecinos, amigos y vecinos de Estados Unidos. Lo digo con todo respeto. Y que no olviden que la democracia en América, en Estados Unidos, comenzó eligiendo a los jueces. Que no olviden eso. Que en Estados Unidos así comenzó la democracia, eligiendo el pueblo a los jueces. Y si quieren bibliografía, que busquen la democracia en América, de Tocqueville. Ahí está cómo se fundó esa gran nación”, dijo.

Sonriente, propuso hacer en ese momento la consulta sobre la elección de los juzgadores del país “aunque mañana nos van a criticar".

“Pero es muy divertido, porque como se enojan tanto, hacen hasta el ridículo. Lo digo con todo respeto. No podríamos vivir tan aburridos. A ver, ¿ustedes qué prefieren? ¿Que a los ministros los elija el presidente y los senadores o que los elija el pueblo?”, preguntó el mandatario federal desde el templete.

Antes de llevar la llamada votación económica (a mano alzada) dijo que aprovechaba el momento para hacerla lo más formal posible, no como las encuestas de Massive Caller que son “para autoengañarse”.

“A ver, que levanten la mano los que piensan que es mejor que a los ministros los elija y a los jueces, el presidente y los senadores. Que levanten la mano. Pues no veo a nadie. Que levanten la mano los que consideren que es mejor que los elija el pueblo, a jueces y magistrados. Bájenla. Abstenciones. Que levanten la mano. No hay abstención”, dijo.

Destacó que también otras acciones durante su gobierno, como la eliminación de 173 fideicomisos "sin ninguna utilidad, que no servían para nada, pero con mucho gasto administrativo”.

“Nos ahorramos 136 mil millones de pesos con esta decisión”, agregó.

Lo anterior, dijo, fue parte de la política de austeridad republicana que se convirtió en una realidad bajo el principio cuya frase él formuló, que no puede haber gobierno rico con pueblo pobre.

Dijo que durante su sexenio en el gobierno no se compró un solo vehículo para funcionarios, pero adelantó que ahora ya va a corresponder al próximo gobierno de Claudia Sheinbaum renovar el parque vehicular.

Al igual que la corrupción, dijo que se ha combatido la impunidad con respeto a la autonomía de poderes, “hasta el extremo de respetuoso de los poderes, los otros dos poderes”.

“Porque durante mucho tiempo en la política autoritaria el poder de los poderes era el ejecutivo. Bueno, hemos actuado de manera respetuosa. No hemos querido transar para que nos aprueben todo.

“Al contrario, hemos denunciado con hechos los actos de corrupción e influyentismo que predominan en el Poder Judicial. Debido a ello, es que enviamos al Congreso una iniciativa para que el pueblo elija a jueces, magistrados y ministros, con el propósito de que impartan justicia en beneficio de todos y no estén al servicio exclusivo de la delincuencia organizada y de la delincuencia de cuello blanco.  Que estén al servicio del pueblo.”, dijo