Nuevo Laredo, Tamps. La escuela de Praderas del Mezquital, un humilde plantel educativo que actualmente enfrenta severas carencias, se ha convertido en un símbolo de la solidaridad entre ciudadanos y medios locales, ante la inacción del gobierno municipal encabezado por Carmen Lilia Cantú Rosas Villarreal.
Ubicada en una zona marginada de Nuevo Laredo, esta escuela, que alberga a 47 niños, carece de instalaciones básicas. Con solo dos pedazos de pared y una lona como techo improvisado, los pequeños reciben sus clases casi al aire libre. La falta de respuesta por parte del gobierno municipal ha llevado al Club de Periodistas Bravo´s de Nuevo Laredo y miembros de la Sociedad Civil a tomar la iniciativa para mejorar las condiciones del plantel educativo.
Efraín de la Cruz Manuel, director de la escuela, expresó su frustración por la falta de apoyo gubernamental: “En estos tres años de administración, la única ayuda que hemos recibido ha sido el uniforme y la mochila para los niños. Yo invitaría a la presidenta municipal a colaborar con nuestro proyecto, que necesitamos urgentemente materiales de construcción, como blocks, varillas, cemento, para hacer el aula.”
De la Cruz Manuel, quien ha dedicado 13 años de su vida a esta escuela, destacó que la comunidad ha comenzado a responder. “Gracias a las donaciones de los padres, familias y periodistas, hemos logrado reunir bloques y otros materiales necesarios. Hoy, iniciaremos la colocación de los bloques con la ayuda de amigos que se han ofrecido como voluntarios.”
Luis Díaz Rodarte, un empresario local, subrayó la importancia de la participación ciudadana: “Vi la publicación y decidí aportar. Es crucial que todos los ciudadanos se sumen a esta causa. Las condiciones en las que estudian los niños son inadecuadas y es necesario que también el gobierno se solidarice con esta situación.”
En la misma línea, Gamaliel Infante, otro empresario local, enfatizó la responsabilidad compartida: “Cuando nos unimos, logramos grandes cosas. Estamos poniendo nuestro granito de arena para construir una escuela digna. Los niños no deberían tener que sufrir por la falta de acción gubernamental.”
La crítica hacia el gobierno municipal ha sido clara. La presidenta Carmen Lilia Canturosas Villarreal ha sido señalada por priorizar ayudas para ciudadanos estadunidenses en lugar de atender las necesidades de los niños locales. El Club de Periodistas Bravos de Nuevo Laredo ha sido fundamental en la recaudación de fondos y materiales, lanzando un llamado a la comunidad para que se una a esta causa.
Félix García, hizo un llamado a la acción: “Es fundamental que la ciudadanía se involucre. La educación es la base para el futuro de nuestros niños y todos debemos hacer nuestra parte. Mientras el gobierno parece hacer oídos sordos, nosotros como comunidad estamos respondiendo a esta necesidad”.
A pesar de la indiferencia de las autoridades municipales, la unión de esfuerzos entre periodistas, empresarios y ciudadanos demuestra que, cuando la sociedad se organiza, puede enfrentar grandes desafíos. La escuela de Praderas del Mezquital sigue siendo un símbolo de la resiliencia y la solidaridad de la comunidad de Nuevo Laredo, en espera de una respuesta efectiva por parte de sus autoridades.