Jackson Hole. Previo a la reunión de banqueros en Jackson Hole, Wyoming, los responsables de política monetaria de la Reserva Federal (Fed) dijeron el jueves que, con la inflación muy por debajo de sus máximos, están prestando mucha atención al mercado laboral estadunidense para calibrar cuándo empezar a reducir las tasas de interés, y uno de ellos sostuvo que deberían actuar “pronto”.
“Creo que es apropiado empezar a relajar pronto”, dijo la presidenta de la Fed de Boston, Susan Collins, señalando su probable apoyo a un recorte de tasas en la reunión del banco central estadunidense del próximo mes.
La inflación se ha relajado “bastante”, dijo Collins a Fox Business.
La Fed tiene como objetivo una inflación anual de 2 por ciento según el índice de precios de los gastos de consumo personal. De acuerdo a ese indicador, la inflación llegó a 2.5 por ciento en julio.
Dado que los mercados laborales gozan de buena salud en general y que la preservación de esa salud es una prioridad, Collins afirmó que “creo que un ritmo gradual y metódico (de recortes de las tasas de interés) una vez que nos encontremos en una postura monetaria diferente será probablemente apropiado”.
Su opinión contrasta con la del presidente de la Fed de Kansas City, Jeff Schmid, una de las autoridades monetarias de línea más agresiva del banco central.
“Tenemos que recibir algunos datos antes de septiembre”, dijo Schmid a CNBC, refiriéndose a la reunión de política monetaria de la Fed del 17 y 18 de septiembre. “Hay cierto margen para considerar hacia dónde vamos a partir de aquí, pero francamente creo que tenemos tiempo”.
Aun así, añadió que “merece la pena analizar más detenidamente” el reciente aumento de la tasa de desempleo, que en julio se situó en 4.3 por ciento.
“Voy a dejar que los datos muestren hacia dónde nos dirigimos (...) Estaría de acuerdo con varios de mis colegas en que probablemente quieran actuar quizá antes de que (la inflación) llegue al dos (por ciento), pero esa sostenibilidad hasta el dos (por ciento) creo que es realmente importante”.
Se espera que el banco central de Estados Unidos comience a reducir su tasa de interés de referencia en su próxima reunión, con la mayoría de los funcionarios de la Fed animados por los alentadores datos de inflación y cada vez más preocupados por la salud del mercado laboral.
Por su parte, los responsables de política monetaria del Banco Central Europeo (BCE) no consideraron urgente reducir los tipos de interés el mes pasado, pero dejaron entrever la posibilidad de un nuevo debate en septiembre, en un momento en que los elevados tipos de interés afectan al crecimiento, según las actas de la reunión celebrada los días 17 y 18 de julio.