Washington. Los funcionarios de la Reserva Federal se inclinaron decididamente por un recorte de los tasas de interés para la reunión de política monetaria de septiembre y varios incluso habrían estado dispuestos a reducir inmediatamente los costos de endeudamiento, de acuerdo a las minutas del último encuentro.
Los responsables del banco central estadunidense mantuvieron sin cambios las tasas en la reunión del Comité Federal de Mercado Abierto del 30 y 31 de julio, pero abrieron la puerta a un recorte en la sesión del 17-18 de septiembre.
Al disminuir las presiones inflacionarias, los mercados financieros esperan que la Fed recorte su tasa de referencia el mes que viene en un cuarto de punto porcentual desde el rango actual de 5.25-5.50 por ciento, en el que lleva fijado más de un año.
Para finales de año se espera una relajación de hasta un punto porcentual.
En la reunión de julio, "la gran mayoría" de los responsables monetarios "observaron que, si los datos seguían siendo más o menos los esperados, probablemente sería apropiado relajar la política monetaria en la próxima reunión", según las actas publicadas este miércoles.
También señalaron que "muchos" funcionarios de la Fed consideraban que la orientación de las tasas era restrictiva y que "unos pocos participantes" sostenían que, en medio de un enfriamiento continuo de las presiones inflacionarias, ningún cambio de tasas significaría que la política monetaria aumentaría el lastre sobre la actividad económica.
Las actas indicaban que, aunque todos los funcionarios estuvieron de acuerdo en mantener las tasas estables en julio, "varios" dijeron que los avances en la reducción de la inflación en medio de un aumento del desempleo "habían proporcionado un caso plausible para reducir el rango objetivo 25 puntos básicos en esta reunión o que podrían haber apoyado tal decisión".
La idea de que la Fed reduzca las tasas se basa en el retroceso de las presiones sobre los precios hacia el objetivo de 2 por ciento fijado por el banco central y al aumento de la ansiedad sobre la situación del mercado laboral tras los recientes datos que muestran un aumento de la tasa de desempleo.
La velocidad del salto de la tasa de desempleo, que llegó a un mínimo de 3.4 por ciento a principios del año pasado y desde entonces ha subido hasta 4.3 en julio, ha añadido urgencia al debate sobre los recortes de tasas y llevado a algunos analistas a decir que debería considerarse una reducción de medio punto porcentual de los costos de endeudamiento en septiembre.