Una sala de la Cineteca Nacional de las Artes en la que se proyectaría la primera película de Guillermo del Toro, Cronos, fue el contexto para un tributo sencillo y amoroso, en el que no hubo rimbombancia, sólo abrazos, sonrisas y lindas palabras para una mujer amada.

“Yo voy de salida, pero mis películas se quedan”, dijo el sábado Bertha Navarro, emblema del cine nacional y ser humano extraordinario, como se vio en el recinto de Churubusco, donde se le homenajeó con el claquetazo inicial de una retrospectiva de películas producidas por ella, (como Cronos), que se exhibirán en 40 cines por todo el país en un ciclo itinerante; también, en 20 televisoras institucionales, así como en la plataforma www.nuestrocine.mx

El Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine) reconoció a una de las pocas productoras en el mundo a quien puede agregársele el adjetivo de “creativas”. Es decir, Navarro se involucra no sólo en conseguir los recursos que harán posible concretar un filme, también en el proceso de éste y con las personas de todas las áreas que lo ejecutan.

Aquél es “un término que no cualquier productor puede tener. En el mundo hay contados, y en México tenemos a Bertha Navarro, productora creativa”. Armando Casas, titular de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas, comentó lo anterior y destacó: “Nadie ha sido más generosa con los jóvenes que comienzan en el cine que ella y no se ha equivocado; siempre ha conseguido que ese joven sea una persona relevante en el quehacer nacional.”

No sólo es la productora que ha plantado semillas de ese arte; las ha regado al punto de verlas convertidas en plantas que, tras un tiempo, terminan siendo árboles que dan sombra a lo que se llama filmografía nacional.

Mujer prolífica La señora es tan querida, que es “mamá de muchos”, como confirmaron algunos chamacos a los que ha impulsado, como Guillermo del Toro (en un video de la red social X la mencionó como “su segunda madre”), Eugenio Caballero (quien envió un video en el que profesa lo mismo) o Alejandro Springall, quien tiene 30 años de ser su socio en dos casas productoras y así la describió: “Bertha es una de las mujeres que más ha parido en el cine nacional, porque también es mi madre. Has sido una guía espiritual.” Springall dirigió Sonora, producida por Navarro, a quien conoció siendo estudiante en Londres.

La homenajeada, con la titular de Imcine, María Novaro. Foto María Luisa Severiano

La describe con una palabra: “congruencia. Es la persona más congruente con sus ideas, sus filosofías, sus acciones. Con ella aprendí a saber dimensionar una película, a desarrollar la intuición para saber dónde está el talento; también la sensibilidad para ubicar dónde están los vulnerables, porque Bertha no nada más es cineasta, es luchadora social, una persona que busca hacer un mundo mejor. Tiene una larga historia de participación política.

Dentro de su congruencia, no ha hecho una cinta en la que no crea en la que haya posibilidad de alcanzar la excelencia”. Destacó: “nunca pierde detalle de toda la gente que participa en una cinta”. Recordó que durante el rodaje de Sonora, en el calor del desierto, “a una temperatura extrema, ella agradecía a cada persona por hacer el esfuerzo de estar ahí”.

Navarro “es una persona fundamental en mi vida”, dijo a su vez el diseñador de producción Eugenio Caballero. En el video expresó: “Pocas personas tienen la capacidad de transformar su entorno como ella. Es un referente en cada decisión que tomo, tanto en el trabajo como en lo personal. Bertha, gracias por quien has sido. No tiene caso hablar del legado.

Quiero expresarte mi agradecimiento; el amor que te tengo. Has sido mi segunda madre y te lo he hecho saber. Además, eres un faro enorme en este oficio y en esta vida… Te adoro”.

María Novaro, titular del Imcine, aseguró que “el valor del legado se vive hoy… si uno rastrea de dónde surgió lo fuerte del cine mexicano, aquí la tenemos sentada”. Y así, sentada delante de una pantalla grande sin proyección, la descubridora de talentos, expresó: “Es tan bello recibir tanto cariño de todos y de mí hacia todos los demás.

Estoy conmovida, pero lo que más me interesa es que se vean las películas, porque hacemos todo por producir un cine de calidad y de pronto, nos topamos con la exhibición… la lucha que hemos dado siempre. Me da gusto que se puedan ver estas cintas maravillosas.

Con cada director que he trabajado he creído en su proyecto porque si no, no me aviento. Es una gran responsabilidad, y siempre he dado lo más que se pueda. El talento brilla; tampoco es tan difícil encontrarlo. Gracias por la atmósfera tan cariñosa”.