En el drenaje de la calle Prolongación Lázaro Cárdenas, del pueblo de San Luis Tlaxialtemalco, en Xochimilco, taponamientos mantienen inundado un tramo de más de 50 metros desde hace dos semanas. Aguas negras que escurren hacia la zona chinampera podrían afectar los cultivos, además de que obstaculizan el acceso a varias viviendas, como la de Manuela Toribio, quien debió colocar piedras en el borde del predio, desde la rampa de acceso para poder salir de su domicilio; las piedras también son utilizadas por vecinos que transitan por esa vialidad.
Sin embargo, la alcaldía ofreció atender el problema hasta después de la fiesta patronal –que se celebrará el próximo lunes–, lo que implica el riesgo de que el líquido estancado y con olor fétido
pueda ocasionar problemas de salud.
Aurelia, vecina también de Prolongación Lázaro Cárdenas, denunció que hace dos meses se reportó el derrame de la tapa de una coladera al inicio de la calle, pero no vinieron a verlo; les vale. Como ya se van...
El agua que escurría se dirigía a otra alcantarilla que está a unos a unos 50 metros, pero también se tapó, y hora ya tenemos el charquerío
, señaló.
Manuela explicó que debido a esa circunstancia se desprenden olores fétidos, sobre todo durante el día, cuando hay mucho sol y transitan automóviles que agitan el agua.
El derrame, además, comenzó a llegar hacia una zanja que va a la red chinampera a través de Canal Nacional.
Productores de la zona comentaron que el problema con el desagüe ya tiene años, pues el agua que escurre del drenaje llega a una zona de ese canal, donde en 2022 el Sistema de Aguas construyó un vertedero de la planta de tratamiento de líquidos residuales Cerro de la Estrella, para evitar el desecamiento de las vías que transportan el agua y proveer así a las chinampas de San Luis Tlaxialtemalco y San Gregorio Atlapulco para el riego de cultivos.
Otra vecina afectada en Prolongación Lázaro Cárdenas debió instalar costales a la entrada de su terreno donde tiene su vivienda semirrústica y un vivero, con el objetivo de atajar la entrada del agua.
En el terreno de enfrente, cruzando la calle, está un montículo de tierra para producir flores de cempasúchil, para 10 mil plantas que están en almácigos en otro terreno dentro de la zona chinampera, las cuales ya deben trasplantar a bolsas para viveros, con el fin de que sigan su crecimiento, pero no tienen manera de acarrear el sustrato mientras la calle siga inundada.