Jit. Líderes israelíes condenaron categóricamente el viernes un letal ataque emprendido por colonos en Cisjordania, ocupada por Israel, en una infrecuente denuncia por parte del Estado israelí de la violencia de los colonos, la cual se ha vuelto más común desde el inicio de la guerra entre Israel y Hamas.

El ataque realizado la noche del jueves por los colonos contra el poblado de Jit, cerca de la ciudad de Nablus en el norte de Cisjordania, provocó la muerte de un palestino y dejó gravemente heridos a otros más, informaron las autoridades de salud palestinas. Residentes entrevistados por The Associated Press dijeron que al menos 100 colonos enmascarados entraron en el poblado, dispararon municiones reales, quemaron casas y autos y dañaron camiones cisterna. En un video se muestra cómo las llamas consumen el pequeño poblado que, según los residentes, tuvo que defenderse por sí mismo sin ayuda militar durante dos horas.

El primer ministro Benjamin Netanyahu dijo que tomaba los disturbios “en serio” y que los israelíes que cometieron actos criminales serían procesados. Emitió lo que pareció ser un llamado a los colonos para que se retiraran.

“Quienes combaten el terrorismo son las Fuerzas de Defensa de Israel y las fuerzas de seguridad, y nadie más”, dijo.

El presidente Isaac Herzog también condenó el ataque, al igual que el ministro de Defensa Yoav Gallant, quien dijo que los colonos habían “atacado a personas inocentes”. Añadió que aquellos no “representan los valores” de las comunidades de colonos.

Los ministros de exteriores de Gran Bretaña y Francia se encontraban en Israel el viernes, y ambos condenaron el ataque.

El embajador estadounidense Jack Lew escribió en X que está “asombrado” por el ataque, y el Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca lo calificó de "inaceptable".

Los palestinos consideran a Cisjordania, capturada por Israel en la Guerra de los Seis Días de 1967, como el corazón de un futuro Estado, una postura que cuenta con un amplio apoyo internacional.

Grupos defensores de derechos humanos afirman que los arrestos por la violencia de los colonos son infrecuentes, y que los procesos legales lo son aún más. El diario izquierdista israelí Haaretz reportó en 2022 que, con base en estadísticas de la policía israelí, solo se presentaron cargos en 3,8 por ciento de los casos de violencia ejercida por colonos, y que la mayoría de los casos se abrieron y cerraron sin que se emprendiera ninguna acción.