Mazatlán al fin respiró. Un mal comienzo en la Liga Mx femenil les había cegado el rumbo hacía la victoria. Esa historia, sin embargo, no volvió a repetirse en Aguascalientes. Necaxa fue la primer presa de las Cañoneras, que hoy se impusieron 2-1.
De esta manera, las mazatlecas alcanzaron sus primeras tres unidades. Las centellas, en cambio, ligaron su tercera derrota consecutiva.
Si algo le había faltado a Necaxa en el inicio de la temporada era la falta de gol.
En sus últimas dos partidas se habían quedado sin marcar.
Allison Veloz, sin embargo, rompió esta racha con un sólido cabezazo. La anotación de Veloz fue apenas la segunda de Necaxa en el torneo.
La mejoría de las centellas se notó con respecto a las anteriores jornadas en las que había recibido ocho anotaciones. Sin la presión de tener que enfrentar a Monterrey o América, clubes que habían sacudido a las necaxistas en las últimas semanas, las locales mostraron una actitud distinta en la primera mitad. No obstante, volvieron a esa irregularidad que les ha perseguido y le permitieron a Mazatlán tomar la riendas del partido. Con una dinámica totalmente distinta a los primeros 45 minutos, la visita mostró su mejor versión en el complemento.
Enekia Lunyamila comenzó la revuelta en el estadio Victoria. La africana encontró las redes tras un pase filtrado y una primera acción en la que tuvo que driblar a la guardameta, para finalmente, con la portería abierta, definir con pierna izquierda.
Sin ningún conformismo, las mazatlecas siguieron insistiendo. La recompensa les llegó en el que posiblemente puede convertirse en uno de los mejores goles de la semana. En una falta que se cobró a escasos metros por delante de la media cancha, Gabriela Álvarez fue la heroína. Pegó un cañonazo de más de 40 metros inatajable para la española Marina Viñoly. Fue un proyectil que cayó precisamente en el ángulo derecho que vigilaba la guardameta.
Atlas, por su parte, aprovechó un par de errores de Tijuana para concretar su segunda victoria de la campaña. El marcador terminó 3-1.
Las fronterizas no eran un rival fácil; venían de hilar tres triunfos. Pero un descuido al comienzo del cotejo y otro al final, rompieron con esta seguidilla.
La falta de comunicación entre la portera Daniela Solera y una de las defensoras, le concedió a Brenda Cerén la oportunidad de apretar un balón dividido que daba la impresión que podía ser despejado. Sin embargo, la delantera atlista utilizó la desconcentración de las tijuanenses para abrir la pizarra.
Aunque Tijuana descontó en la segunda parte, y por muchos lapsos fue dominador, Atlas lapidó el encuentro en los últimos instantes (92’ y 94’)
María Salas se benefició de otra falla de comunicación, mientras que María Pérez, segundos después, amarró la victoria con un disparo de larga distancia.