Para afrontar las extorsiones que han denunciado productores de limón y de otros productos en regiones de Michoacán, la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum, se pronunció por “cambiar la dinámica de la denuncia” y emprender una “estrategia particular” ante este tipo de delitos, con mayor presencia e inteligencia de las fuerzas policiacas. Al enfatizar que las acciones deben estar acompañadas de detenciones, apuntó que para ello se requiere denuncias pero éstas no se presentan por temor. Se inclinó por perseguir por oficio estos casos, y elevar a delito grave la extorsión.

En conferencia de prensa en su casa de transición, Sheinbaum Pardo se refirió a las denuncias que hicieron productores limoneros el lunes, y quienes anunciaron una suspensión por tiempo indefinido del corte y recolección de limón, ante las amenazas de delincuentes organizados.

Consultada sobre la estrategia que asumirá en este renglón, explicó que hay una iniciativa en la Cámara de Diputados para que en el artículo 19 Constitucional se considere la extorsión como delito grave, con prisión preventiva oficiosa, para lo cual también deberá modificarse el código penal federal y estatales.

“Yo pienso que además de eso, la extorsión tiene que tener una característica que lo hizo ya el gobernador de Michoacán, que es que se persiga de oficio, que es importante porque a veces quien es víctima de una extorsión no quiere denunciar por temor y entonces hay que romper ese círculo en donde no quieres denunciar entonces no hay una carpeta de investigación contra quien extorsiona, y ahora pues además no es delito grave”.

Subrayó que “tiene que haber una estrategia en particular para la extorsión y tiene que ver con esto, con delito grave que ya lo presentó el presidente, con que se siga de oficio y también con el fortalecimiento de la inteligencia y la investigación”.

Al recordar que su plan en materia de seguridad se basa con la atención a las causas, fortalecimiento de la guardia nacional, inteligencia e investigación con un sistema nacional de inteligencia, dijo que estas acciones buscan “poder detener a quien hace una extorsión” y “seguir avanzando para seguir disminuyendo la impunidad”.

Y al recalcar que, también habría presencia policiaca, insistió que “también es inteligencia e investigación, porque es presencia pero también detención de quien hace la extorsión, de las bandas dedicadas a la extorsión. Para detener a una banda que se dedica a la extorsión pues tiene que haber una denuncia, quien hace la denuncia a veces no quiere denunciar por temor y si denuncia a veces no es catalogado como delito grave y la persona queda libre siguiendo su proceso en libertad. Entonces eso genera todavía menos confianza a quien recibe la extorsión para denunciar, entonces por eso hay que cambiar la dinámica de la denuncia de la extorsión, y son las dos: presencia e inteligencia”.

Llama a seguir demandas contra armerías

Además, la próxima mandataria sostuvo que “es importante que continúen las demandas” que ha presentado México en Estados Unidos, contra distintas armerías. Tras el revés de la semana pasada, cuando un juez estadunidense rechazó la demanda civil del gobierno de México por reparación de daños contra seis empresas armeras, Sheinbaum Pardo llamó a esperar el curso de las demandas que siguen pendientes.

“Entiendo que no es la única demanda, que todavía hay otras demandas en curso y vamos a esperar estas otras demandas para ver cómo actúan los jueces en este caso a esta demanda que ha interpuesto México. Normalmente desde Estados Unidos el tema principal es el tráfico de diferentes estupefacientes, drogas de México hacia Estados Unidos. Y México antes tomaba esto como el único tema… Pero por primera vez se planteó, bueno, ¿y qué pasa con el tráfico de armas de Estados Unidos a México?”, dijo Sheinbaum Pardo.

“Entonces es muy importante que continúen estas demandas y nosotros vamos a seguir hablando en estos términos y colaborando, coordinándonos con Estados Unidos desde una posición de soberanía, de independencia de México, sobre todo frente a la participación de las diferentes agencias en nuestro país, de coordinación, de colaboración, pero no de intervencionismo, que es distinto. Pero además, pues a nosotros nos interesa reducir la violencia, los índices de alto impacto, los homicidios”, agregó.

-¿Será entonces una condicionante o por lo menos un punto que no se puede quitar de la mesa en las negociaciones?, se le preguntó.

-No es condicionante, es un diálogo, el diálogo pues no es condicionante, son posiciones que se reflejan en la mesa pero a nosotros evidentemente que nos importa que no sigan pasando armas a México y por eso la denuncia que en su momento promovió el canciller Marcelo Ebrard es muy importante.

Contrastó que, mientras ante la estrategia de seguridad tenía como eje el plan Mérida, en el que Estados Unidos definía las prioridades que debía asumir México, ahora hay un acuerdo bicentenario en el que se contempla una relación de iguales.