Puebla, Pue. Este lunes, una comisión de ejidatarios de Ignacio López Rayón, encabezados por sus asesores Jorge Portilla y Patricia Rodríguez Flores, serán recibidos por la Secretaría de Gobernación federal (Segob), en la ciudad de México, para reiniciar una mesa de diálogo que se rompió hace más de un mes por el incumplimiento de acuerdos por parte de las autoridades.
La reunión pactada permitió levantar el bloqueo que campesinos mantuvieron por cinco días a las autopistas México–Puebla, Arco Norte, Tlaxco–Tejocotal y Apizaco–Huamantla que fue orquestado por más de 10 mil campesinos, a quienes no les pagaron los derechos de vía de diferentes regiones del país, para la construcción de carreteras.
El acuerdo fue resultado de un encuentro entre los asesores de los campesinos y el titular de la Unidad de Gobierno de la Segob federal, Tonatiuh Ramírez Guevara, que se llevó a las 21:30 horas del viernes y concluyó a las 3:30 del día siguiente en las instalaciones de Casa Aguayo.
Al salir del edificio gubernamental, el secretario de Gobernación del estado, Javier Aquino Limón, anunció que se logró reabrir en su totalidad las autopistas, en sus dos sentidos, luego de acordar con los ejidatarios que este lunes serán recibidos por la autoridad federal, para iniciar el proceso de avalúo de las tierras por parte de la Secretaría de Comunicaciones y Transporte.
“Será este lunes 12 de agosto, cuando los ejidatarios, sus comisiones y asesores, sean recibidos en las instancias federales, para dar acompañamiento y seguimiento a sus demandas”, anticipó.
El funcionario estatal, quien fungió como intermediario en el conflicto agrario, aclaró que el cierre de las carreteras no solo fue del ejido Ignacio López Rayón del municipio de Tlahuapan, sino de campesinos de tres entidades más, entre ellos, Hidalgo, Estado de México y Tlaxcala.
Reconoció que la causa de las protestas tuvo un “interés sano” debido a que el adeudo por la expropiación de tierras para la construcción de la autopista México-Puebla data de hace 62 años, y apenas están pagando los derechos de vía.
Destacó que el diálogo abierto fue instruido por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, y el gobernador Salomón Céspedes Peregrina, para garantizar la paz social y a la gobernabilidad.
No habrá represión ni criminalización de la protesta
Por su parte, la abogada Patricia Rodríguez Flores informó que, como parte de los acuerdos, no habrá represión ni criminalización de la protesta social contra los campesinos.
En entrevista, la representante legal de los ejidatarios pidió al presidente López Obrador que cese el ataque en su contra en las conferencias mañaneras, donde recientemente acusó que busca “sacar raja” y provecho personal del conflicto agrario.
“Nosotros simplemente hemos hecho un trabajo honesto durante 14 años, con interponer juicios que tienen sentencias favorables, que condenan a las distintas dependencias al pago de las tierras”, argumentó.
A pesar del resolutivo judicial a favor de los ejidatarios, señaló que llevan más de dos años sin poder ejecutar la sentencia, debido a que los tribunales agrarios han impuesto una infinidad de requerimientos y multas para evadir la ley.
Agregó que como parte de los acuerdos se logró la no criminalización de la protesta social y la no persecución, debido a que el pasado miércoles en una rueda de prensa en el plantón instalado en la autopista, a la altura de Tlahuapan, personal de la Fiscalía General del Estado se apersonó para notificarles presuntas denuncias en su contra.
Por otro lado, Patricia Rodríguez anticipó que para dar cumplimiento a los acuerdos se van a ir programando los ejidos afectados para dar una salida a cada expediente y se les pueda pagar.
Por parte del movimiento campesino, la abogada aseveró que el compromiso firmado en una minuta es que no se retomarán los cierres durante el proceso de negociación.
Confió que el gobierno federal cumpla, luego de revelar que había acuerdos firmados previamente, pero algunas dependencias federales los desconocieron y ahora se van a tener que respetar.
Al final, precisó que en total son más de mil 600 ejidatarios que serán indemnizados con el pago de sus tierras, entre ellos algunos casos desde hace más de medio siglo.
La misma mañana de este sábado, los labriegos comenzaron a retirarse y levantar sus campamentos en las cuatro autopistas que mantuvieron bloqueadas.
El pasado 6 de agosto, campesinos de Puebla, Tlaxcala, el Estado de México e Hidalgo mantuvieron bloqueos totales simultáneos en las autopistas más importantes del país.
La demanda principal es la indemnización de sus tierras a valor catastral, que les fueron expropiados para la construcción de varios tramos carreteros, entre ellos una deuda histórica de hace 60 años a los ejidatarios de Ignacio López Rayón, del municipio de Tlahuapan, a quienes arrebataron sus predios para edificar la autopista México–Puebla.