Ciudad de México. En un sentido homenaje, familiares, amigos y compañeros del Comité 68 recordaron a Raúl Álvarez Garín, uno de los personajes más emblemáticos del movimiento estudiantil, en el 83 aniversario de su natalicio y de quien destacaron su labor en las luchas sociales.
En el ex templo de Corpus Christi, en Centro Histórico, su hermana Tania Álvarez Garín recordó cómo desde su juventud Raúl mostró interés en los movimientos sociales, luego de que en la preparatoria “inició un grupo con otros compañeros para apoyar, por ejemplo, la huelga de los ferrocarrileros”.
Eso viene de familia, “mis papás siempre fueron gente de izquierda y además muy militantes, todo eso lo absorbe uno en la casa y siempre la plática familiar era sobre la situación del mundo, de México”, aseguró frente a compañeros como Félix Hernández Gamundi y Ana Ignacia Rodríguez, La Nacha.
Tania destacó también que además de todas esas cualidades su hermano era muy afectuoso, solidario y disfrutaba de la vida. “Siempre tuvo un pensamiento claro de lo que estaba pasando y era un pilar al que te acercabas para tratar de entender la situación del país”, dijo.
Como parte del homenaje, Santiago Álvarez Campa, hijo del escrito y militante de izquierda, interpretó junto con su grupo piezas de música barroca. Después fue inaugurada una exposición fotográfica.
Ahí, La Nacha, sobreviviente de la matanza estudiantil en Tlatelolco, expresó que gracias a Raúl se integró a las filas del Comité 68.
Comentó que actualmente trabaja en un proyecto de rescate de memoria de la ex cárcel de mujeres de Santa Martha Acatitla, en la alcaldía Iztapalapa, donde ella estuvo presa. “Que se quede como un legado de que las mujeres del 68 no tendríamos por qué haber estado nunca en una prisión de ese tipo”, externó.
A su vez, Félix Hernández Gamundi evocó las reflexiones que hizo Álvarez Garín respecto a lo indispensable que era, desde ese tiempo, una reforma integral del modelo de justicia ante las dificultades para “entablar las demandas por genocidio por las masacres de Tlatelolco”.