La tasa de interés de los préstamos hipotecarios más populares en Estados Unidos cayó la semana pasada a su nivel más bajo en 15 meses, después de que la Reserva Federal (Fed) indicó que podría empezar a recortar su tasa de interés oficial en septiembre y de que un cambio a la baja en el mercado laboral reforzó las apuestas del mercado financiero a que las reducciones de los costos de los préstamos serían importantes.
La Asociación de Banqueros Hipotecarios informó el miércoles que la tasa promedio de las hipotecas a tipo fijo a 30 años bajó 27 puntos básicos en la semana que terminó el 2 de agosto, para quedar en 6.55 por ciento. Se trata de la tasa de interés más baja desde mayo de 2023 y la mayor caída en dos años.
El descenso ofrece a los compradores de vivienda un alivio largamente esperado en lo que se ha convertido en un mercado inmobiliario cada vez más inasequible en los últimos años, a medida que aumentaban tanto los precios de la vivienda como los costos de los préstamos.
La dificultad se puso de manifiesto el miércoles en el índice de confianza inmobiliaria de julio de Fannie Mae, la compañía de financiación hipotecaria respaldada por el gobierno. Sólo 17 por ciento de los encuestados afirmó que era un buen momento para comprar una vivienda, frente a 19 por ciento de junio, de acuerdo con los datos de Fannie Mae.
Además, el 35 por ciento dijo que alquilaría su próxima residencia -en lugar de comprarla-, la proporción más alta desde 2011.
“En este momento, es difícil decir si esto refleja una simple fatiga del comprador o una mayor sensación de desencanto con el mercado, pero creemos que podría tener implicaciones importantes en caso de que la tendencia continúe”, dijo Doug Duncan, economista jefe de Fannie Mae, en un comunicado.