Buenos Aires. El gobierno de Argentina redujo el martes en 25 por ciento un impuesto a las exportaciones de carne bovina a 6.75 por ciento desde 9 por ciento previo, cumpliendo en parte una promesa que el presidente libertario Javier Milei había hecho a productores agropecuarios.
En el caso de la carne porcina, su tasa para exportación será de 3.75 por ciento desde 5 por ciento anterior.
Además el país sudamericano eliminó derechos de exportación para productos de la carne bovina y porcina, así como de los lácteos.
Argentina es un tradicional exportador mundial de carne bovina, la cual tiene como principal destino el mercado chino, que en el primer semestre compró 70.8 por ciento de las 454.712 toneladas exportadas desde el país sudamericano.
La medida se tomó “para promover las ventas a mercados externos, mejorar el nivel de ingresos de los productores y elaboradores, favoreciendo la inserción en los mercados internacionales”, explica el decreto publicado en el Boletín Oficial.
Por su parte, el Ministerio de Economía ponderó que “estas disposiciones, que se enmarcan en un proceso más amplio de desregulación, baja de aranceles a insumos agrícolas, apertura de mercados internacionales y simplificación de trámites en el control comercial, apuntan a seguir quitando el peso del Estado de los hombros de la producción agropecuaria, responsable de 1.2 millones de empleos y del 63 por ciento del total exportado por la Argentina”.
Milei, un ultraliberal de derecha, había prometido durante su campaña presidencial el año pasado que eliminaría los impuestos a las exportaciones de productos agropecuarios.
La medida fue festejada por Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), una de las asociaciones agropecuarias más importantes del país, que en la red social X dijo que “éste es un paso importante en la dirección correcta para nuestro sector agroindustrial”.
“Celebramos esta medida y reafirmamos nuestra postura: creemos firmemente que todas las retenciones deben eliminarse dentro de este periodo de gobierno”, añadió CRA.
El gobierno argentino continúa aplicando un impuesto de 12 por ciento a las exportaciones de trigo y de maíz, y de 33 por ciento a los embarques de soya.