Una jornada después de caer 12.4 por ciento, la más pronunciada desde 1987, el Nikkei 225, compuesto por las 225 empresas más importantes de la bolsa de valores de Tokio, rebotó bruscamente en los primeros minutos de operación de este martes en Asia.

El principal índice accionario nipón abrió con una ganancia de 10.52 por ciento este martes, a 34 mil 353 puntos. De mantener el rebote, el Nikkei 225 pondría fin a tres sesiones consecutivas con tendencia negativa.

Las ganancias en el mercado asiático siguieron a fuertes pérdidas en Wall Street, pero no a la misma escala que la debacle del lunes en Japón.

El Nikkei está ahora cerca del nivel que estaba hace un año. La mayor ganancia porcentual de la historia en el Nikkei fue del 14.2 por ciento en octubre de 2008.

El Banco de Japón (BoJ), que elevó las tasas de interés a su nivel más alto desde 2008 el 30 de julio, hizo que el yen se fortaleciera a un máximo de siete meses, presionando a las acciones.

Los mercados a nivel mundial también se asustaron por los temores de una recesión en Estados Unidos, avivada por un informe de empleos más débil de lo esperado.

El yen se debilitó más del 0.20 por ciento para operar a 144.56 yenes frente al dólar. Mientras que el peso mexicano, en operaciones internacionales, se apreció en alrededor de 19.2976 unidades por dólar.

Kospi de Corea del Sur saltó por encima del 3 por ciento, mientras que el Kosdaq, de pequeña capitalización, subió más del 4.5 por ciento. Los mercados surcoreanos se detuvieron temporalmente el lunes después de que cayeron un 8 por ciento. El CSI 300 de China continental se abrió plano, mientras que el índice Hang Seng de Hong Kong aumentó un 1.03 por ciento. El S&P/ASX 200 de Australia abrió con un avance de 0.27 por ciento.

Los precios del petróleo también aumentaron, con el crudo Brent que subía 1.30 por ciento, a 77.28 dólares por barril. El West Texas Intermediate aumentó un 1.63 por ciento, para operar a 74.11 dólares.

Lo que pase en la sesión asiática será determinante para saber el ánimo con el que arrancarán los mercados en Estados Unidos y México este martes. No obstante, las incertidumbres y las incógnitas sin despejar no se han ido de los mercados financieros mundiales. De ahí que la volatilidad se intensificó.