Washington. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, elogió el trabajo de los funcionarios estadunidenses en la captura de los líderes del cártel de Sinaloa Ismael El Mayo Zambada y Joaquín Guzmán López, uno de los hijos de El Chapo Guzmán, en un comunicado difundido ayer por la Casa Blanca.
En tanto, Zambada, de 76 años, detenido el jueves en El Paso, Texas, compareció en silla de ruedas, ayer por la mañana ante un tribunal federal de esa ciudad, donde se declaró no culpable de los cargos de narcotráfico que se le imputan en Estados Unidos y tendrá una nueva audiencia el próximo miércoles.
Por su parte, se espera que Guzmán López comparezca el martes para su audiencia inicial en el Tribunal Federal del Distrito de Chicago, informó The New York Times.
Ayer (el jueves), el Departamento de Justicia detuvo a Ismael Zambada García y Joaquín Guzmán López, dos de los líderes más notorios del cártel de Sinaloa, una de las empresas más mortíferas del mundo. Se les acusa de dirigir las redes de fabricación y tráfico de drogas del cártel. Elogio la labor de nuestros funcionarios encargados de la aplicación de la ley que llevaron a cabo esta detención por su trabajo continuo para llevar a los líderes de Sinaloa ante la justicia
, señaló Biden en un comunicado de la Casa Blanca.
Zambada y Guzmán López enfrentan cargos por trasiego de drogas a Estados Unidos, incluido el letal fentanilo, causante de decenas de miles de muertes cada año en ese país.
Al comparecer ayer con la ayuda de un intérprete, ante el tribunal federal de El Paso, Texas, Zambada escuchó la lectura de sus derechos y los delitos por los que fue detenido. La jueza confirmó la acusación formal del gobierno estadunidense por conspiración para liderar operaciones de una empresa con actividad relacionada con el crimen organizado; actividades que buscaban la distribución de sustancias controladas como mariguana o cocaína en envíos de mil kilogramos o más; posesión de armas de fuego con fines de tráfico de drogas, así como asesinato y tráfico de drogas.
Luego de unas horas, Zambada se declaró no culpable de cargos de narcotráfico, según registros judiciales, que mostraron que el cofundador del cártel de Sinaloa renunció a su derecho a acudir ante la justicia y ordenó que se presentara la declaración en su nombre.
El tribunal ordenó su detención sin derecho a fianza y está previsto que comparezca ante la jueza Anne Berton el próximo miércoles, de acuerdo con los registros, pero al renunciar a su derecho a estar presente en la lectura de cargos del miércoles deberá ir el jueves para comparecer ante la jueza de distrito Kathleen Cardone, quien supervisará el resto del caso.
Acabó en EU contra su voluntad
: abogado
Frank Perez, abogado de El Mayo, no respondió de inmediato a solicitudes de comentarios, pero en declaraciones a Los Angeles Times dijo que su cliente acabó en Estados Unidos en contra de su voluntad
, luego de que fuentes de seguridad informaron a la cadena Fox News que Joaquín Guzmán, el otro detenido durante la operación, pactó con las autoridades estadunidenses entregarse y engañó a Zambada para facilitar la negociación.
Según un funcionario estadunidense que habló bajo anonimato con la agencia Ap, El Mayo habría sido traicionado por Guzmán y subido con engaños al avión que lo llevó a Estados Unidos. Supuestamente, a Zambada se le dijo que iba a otro lugar antes de ser arrestado el jueves en El Paso, Texas.
El servicio de seguimiento de vuelos Flight Aware mostró que el avión dejó de transmitir su altitud y velocidad durante unos 30 minutos del jueves mientras se encontraba sobre las montañas del norte de México antes de reanudar su rumbo hacia la frontera con Estados Unidos.
Uno de los cabecillas más viejos y más astutos
Zambada ha sido uno de los capos más viejos y astutos de México y nunca pisó una cárcel, sobrevivió a décadas de guerras territoriales y ascendió a la cima del hampa gracias a su astucia para llevar los negocios. Fue conocido por dirigir las operaciones de contrabando del cártel, pero manteniendo un perfil bajo, y por sus vínculos y conexiones internacionales.
No obstante, los últimos informes de la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) apuntaban a que Zambada estaba mal de salud y que tenía varios padecimientos que cuestionaban su liderazgo frente al cártel de Sinaloa, como una diabetes agravada que podría haber evitado que siguiera manteniendo su perfil bajo.
Ha sido conocido por concentrarse en la parte comercial del narcotráfico y evitar en lo posible la violencia generalizada porque consideraba que eso llamaba la atención de las autoridades y complicaba las operaciones del cártel, un estilo muy diferente al de capos más jóvenes, conocidos por sus extravagantes estilos de vida y brutales tácticas como decapitar o desmembrar a sus rivales.