Washington. La economía de Estados Unidos creció más de lo esperado en el segundo trimestre de 2024, 2.8 por ciento en proyección anual, contra 1.4 por ciento en el primer trimestre, según la primera estimación del Departamento de Comercio, publicada este jueves.
Los analistas anticipaban un crecimiento más fuerte en el segundo cuarto del año, aunque de menor magnitud (1.9 por ciento) para el período abril-junio, según el consenso publicado por briefing.com. Estados Unidos mide el crecimiento de su economía en el trimestre con una proyección a 12 meses basándose en las condiciones al momento de la medición.
En la comparación trimestral, el crecimiento fue de 0.7 por ciento, contra 0.4 entre el primer trimestre de este año y el último del año pasado.
El Departamento de Comercio explica este fortalecimiento del crecimiento por un "alza de los gastos de consumo, tanto de bienes como de servicios", y también "un crecimiento de la inversión privada en inventario" en las empresas.
Estos datos son una buena noticia para el presidente Joe Biden y para su vicepresidenta, Kamala Harris, quien será nominada candidata del Partido Demócrata para las elecciones presidenciales del 5 de noviembre y buscará defender los logros económicos del gobierno como argumento de campaña.
Los datos podrían inquietar a los inversores, que esperan cierto debilitamiento de la economía estadunidense que apuntale una decisión de recorte de tasas de interés por parte de la Reserva Federal a partir de septiembre.
El Departamento de Comercio publicará el viernes el índice PCE de inflación, el más seguido por la Fed para determinar su política monetaria.
La inflación se moderó en 2023, pero se estabilizó en un nivel superior a 2 por ciento anual al que apunta la Fed, que aún no flexibiliza su política monetaria como esperan los mercados.
La plaza financiera esperaba tres recortes en 2024 y aún no ha ocurrido ninguno. Las tasas se ubican en máximos en más de 20 años, de 5.25-5.50 por ciento.
Tasas altas encarecen el crédito y enfrían el consumo y la inversión, bajando así presiones sobre los precios. Son, por ende, un mecanismo de control de la inflación.
Ahora, el mercado espera apenas un recorte de los tipos de interés este año, que según las proyecciones de los especialistas no debería ocurrir en la próxima reunión de su Comité de Política Monetaria (FOMC) los días 30 y 31 de julio.