A pesar de los esfuerzos del gobierno federal por mejorar las condiciones en que niñas, niños, adolescentes y jóvenes indígenas acceden a la educación, en el ciclo escolar 2021-2022, sólo 49.4 por ciento de los menores monolingües de 12 a 14 años asistían a un colegio, frente a 91.2 por ciento del resto de la población.
El informe El derecho a la educación de la población indígena de México. Ciclo 2021-2022, elaborado por la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu), destaca que prevalecen brechas y desigualdades que afectan directamente a la población indígena y a los hablantes de lengua originaria en particular.
Subraya que en 20 años, la escolaridad promedio de la población indígena sólo mejoró 2.2 grados, al pasar de cuarto grado de escolaridad en 2000, a 6.2 grados para 2020, mientras en el resto de la población pasó de 7.7 a 10 años en promedio.
Debido a que para elevar 1.1 grados la escolaridad promedio de la población transcurren alrededor de 10 años, la Mejoredu advierte que tendrían que pasar entre 30 y 40 años para que la población indígena llegara al promedio de escolaridad que alcanza actualmente el resto de la población
.
Los estados con la escolaridad promedio más baja entre la población indígena y los hablantes de lengua indígena son: Chihuahua, con 5.5 y 4.7; Chiapas, 6 y 5.7; Guerrero, 6.1 y 5.6; Veracruz, 6.5 y 5.6; Puebla, 6.7 y 5.8; Nayarit, 6.6 y 6.1; Durango, 6.7 y 6.3, y Oaxaca, 6.8 y 6. En estas entidades el grado promedio de escolaridad del resto de la población fue mayor a 8.5 grados.
Entre los principales hallazgos del estudio se incluye que el porcentaje de no asistencia a la escuela de la población indígena y hablantes de lengua indígena de 3 a 17 años se situó en 19.9 y 23.3 por ciento, respectivamente, mientras para la población no indígena fue de 15.9 por ciento.
Por grupo de edad, la Mejoredu revela que en la población indígena de tres a cinco años, amplios segmentos no asisten a la escuela, pero se agudiza en la población monolingüe, pues sólo 51.8 por ciento llega a las aulas.
En los niños de seis a 11 años, si bien se alcanza la mayor asistencia escolar, la diferencia es evidente en detrimento del grupo monolingüe
, pues sólo asiste 87.5 por ciento, frente a 95.6 por ciento del resto de la población.
En el grupo de 12 a 14 años, las diferencias son más amplias. Las brechas entre el resto de la población y los grupos de población indígenas son del orden de 6.2 por ciento con la población indígena; 11.2 por ciento con la de hablantes de lengua indígena y de 41.8 por ciento con la monolingüe
.
En el grupo de 15 a 17 años, alerta la comisión, las distancias entre grupos poblacionales se vuelven más amplias: sólo 5.2 por ciento de la población monolingüe asistió a la escuela; mientras en el otro extremo el indicador para el resto de la población fue de 74.3 por ciento
.
Por entidad, el informe revela que los mayores porcentajes de no asistencia a la escuela para la población indígena fueron Chihuahua (38.9 por ciento), Sinaloa (36.8), Colima (36.6),Zacatecas (32.4), Chiapas (26.7), Jalisco (26.6) y Guanajuato (26.1 por ciento).