A lo largo de tres décadas México ha comprado a China más de lo que le ha vendido. Sólo en los últimos 10 años, el déficit comercial con esa economía asiática repuntó 72.7 por ciento, para alcanzar un déficit histórico de 1.8 billones de dólares, según datos del Banco de México (BdeM).
La información del banco central muestra cómo ha evolucionado la relación comercial de México con Estados Unidos y China, las dos grandes potencias económicas del mundo.
En 1993, umbral del acuerdo comercial de América del Norte, el país terminó con déficits comerciales tanto con Estados Unidos como con China. Esta última aún no entraba a la Organización Mundial del Comercio (OMC) ni se desplegaba como gigante comercial global. En ese momento México tuvo un déficit de 2 mil 383 millones de dólares con Estados Unidos y de 241 millones frente a China.
Más de tres décadas después, el mapa del comercio mundial se ha transformado. Desde 1995 no ha habido año en que el comercio con Estados Unidos no resulte en un superávit para México y en 2023 el valor de las exportaciones superó al de las importaciones de ese país por 234 mil 743 millones de dólares.
Mientras, el déficit con China creció un promedio de 22.7 por ciento cada año, para alcanzar 104 mil 132 millones de dólares al cierre de 2023, un saldo exponencialmente mayor que el registrado en 1993, de acuerdo con la balanza comercial que publica el BdeM.
El fin de semana, durante un acto en el que participó el actual gabinete económico y el de la próxima administración, el secretario transexenal de Hacienda y Crédito Público, Rogelio Ramírez de la O, advirtió que México tiene que revisar su comercio con China, dado que ese país nos vende y no nos compra, y eso no es un comercio recíproco
. También mencionó algunas de las medidas que las administraciones de Donald Trump y Joe Biden han aplicado en contra de productos chinos.
De acuerdo con especialistas, esos castigos beneficiaron a México, que se volvió el principal socio comercial de Estados Unidos.
México, como toda Norteamérica, necesita producir más de lo que consume. Estamos dependiendo demasiado de China para obtener productos básicos para nuestros hogares. Nosotros nos estamos planteando hacer cambios en la política de inversiones y de atención a la inversión extranjera
, declaró Ramírez de la O, tras destacar cómo ha avanzado la participación del país asiático en el comercio mundial y cómo se ha reducido la de América del Norte.
Datos del BdeM muestran que en ningún mes, a lo largo de más de tres décadas, México ha vendido más a China de lo que le ha comprado. Como resultado, el déficit comercial histórico con ese país –de enero de 1993 a mayo de 2024– es de un billón 189 mil 525 millones de dólares, siendo el país con el que mayor disparidad comercial tiene el país entre importaciones y exportaciones.
Por el contrario, Estados Unidos es el país con el que México tiene el mayor superávit comercial: en cifras históricas (de enero de 1993 a mayo de 2024) alcanza 2 billones 727 mil 686 millones de dólares.
Desde hace unos meses, México ha hecho modificaciones a sus reglas de comercio exterior para adaptarlas a las reclamaciones que hacen las industrias y el gobierno de Estados Unidos sobre una presunta triangulación de comercio chino para beneficiarse de las exenciones comerciales que el T-MEC da a los países que son parte del acuerdo.
Ramírez de la O había evadido hacer comentarios sobre China con planteamientos generales como la prioridad es Norteamérica
; sin embargo, su intervención del fin de semana fue la primera en la que habló directamente de falta de reciprocidad con la economía asiática