Apenas minutos después del partido Tijuana-Guadalajara, los gri-tos de auxilio de una mujer que intentaba reanimar a un aficio-nado de Xolos, quien recibió disparos de bala en la cabeza y el cuello, quedaron registrados en video en uno de los accesos al estacionamiento del estadio Caliente. La Fiscalía General del estado confirmó que la víctima –Carlos Alfredo Cárdenas Ramos, de 33 años– murió más tarde al llegar a la clínica 20 del Instituto Mexicano del Seguro Social, donde fue trasladado. Según imágenes difundidas en redes sociales, el hombre originario de Baja California, de pantalón blanco y camiseta del equipo, estuvo involucrado en una riña a golpes con seguidores de Chivas en las gradas y, posterior a su salida, sufrió un ataque armado alrededor de las 22:35, hora del Pacífico.
Algunos testigos señalan que quienes ejecutaron a Carlos Alfredo lo siguieron desde el otro extremo del inmueble, donde se originó la pelea, para luego dispararle en el tercer acceso vehicular. La policía municipal no reportó personas detenidas. Mientras la Liga Mx y el club fronterizo pusieron a disposición de las autoridades locales los recursos e información necesaria
para ayudar a esclarecer los hechos, la Comisión Disciplinaria notificó que, a partir de la información que le brinden árbitros, comisarios y autoridades designadas para el juego, resolverá las sanciones correspondientes a los clubes implicados.
De acuerdo con el artículo 48 del reglamento de sanciones, es obligación de los clubes locales mantener el orden y la seguridad no sólo dentro del estadio, sino también en sus inmediaciones antes, durante y después de los partidos
. Las sanciones derivadas de no cumplir esta norma van de 200 hasta 20 mil UMAs, además del cierre del inmueble por uno o más encuentros, según las pruebas recabadas.
Una vez concluida la investigación, se emitirá una resolución detallada con las sanciones correspondientes
, informó el órga-no disciplinario. En respuesta a dicho proceso, el propietario de Grupo Caliente, Jorge Hank Rhon, señaló que los incidentes ocurrieron afuera del estadio, no adentro
, por lo que la responsabilidad corresponde a las autoridades de gobierno. De cualquier forma, es una tristeza. Se está desbordando la inseguridad, ojalá que se pongan las pi-las los encargados. Es una cuestión del gobierno, de la policía, no de los empresarios
.
Como autoridad municipal, el ayuntamiento de Tijuana refutó horas después las declaraciones del empresario mexicano y precisó que el estadio Caliente y su estacionamiento son propiedad privada
, de modo que deben juzgarse como tal. Para trabajar en una ruta común y evitar más hechos de violencia como el sucedido en el estadio Corregidora de Querétaro, el 5 de mar-zo de 2022, autoridades del estado organizaron diferentes reuniones con los clubes de la entidad.
En ellas participaron los tres niveles de gobierno, estableciendo protocolos coordinados y unificados para garantizar
la seguridad. Al mismo tiempo, además de vetar por un año el recinto queretano –club que también pertenece a Grupo Caliente–, la Liga Mx implementó la identificación de los aficionados mediante el sistema FanID en otro intento por mitigar la violencia en los estadios. Sin embargo, la espiral de agresiones y conductas violentas no tuvo fin.
En enero pasado, una aficionada de Monterrey murió al ser embestida por una camioneta conducida por seguidores de Santos en las afueras del estadio TSM Corona, en Torreón, al término de un partido de la Liga Mx. Otros enfrentamientos se presentaron desde entonces en los estadios de Toluca, Monterrey, Guadalajara, Mazatlán, San Luis y la Ciudad de México, donde simpatizantes del América y León protagonizaron, en diciembre de 2023, una bata-lla campal en las tribunas altas del Azteca. Las imágenes circularon en redes sociales.
Esto es apenas una pequeña porción de la trama de poder que se asoma en la superficie
, analiza el argentino Ariel Scher, reconocido docente y escritor de temas relacionados con el deporte, la política y la sociedad. “La violencia tiene actores diversos, los más visibles son los barras o hinchas violentos, pero el futbol está atravesando por más violencias económicas, físicas y culturales. No sólo nos quita la posibilidad de ir a la cancha, sino que agrega más cosas espantosas. Se convierte en el marco de un tiempo de cosas perdidas en el que cada club juega su papel”.
Hasta el momento, el presidente de la Liga, Mikel Arriola, no ha emitido una declaración sobre los incidentes. Medios locales afirman que el hombre asesinado con la camiseta de Xolos fue procesado en 2015 y 2016 por delitos contra la salud y que, en 2010, fue aprehendido por posesión de arma de fuego.