Morelia, Mich. La comunidad nahua de Ostula, municipio de Aquila, denunció que desde el 1 de julio, este pueblo ubicado a 15 kilómetros de la costa del Pacífico, dijeron que están siendo atacados de forma violenta con explosivos por integrantes del cártel Jalisco Nueva Generación, sobre todo en los puntos de seguridad de la guardia comunal.
En un comunicado de prensa, las autoridades comunitarias aseguraron que desde este miércoles 3 de julio se escucharon nuevamente explosiones provocadas por drones, así como detonaciones de armas de grueso calibre, en las inmediaciones la comunidad vecina de La Cofradía.
Cabe señalar que la oficina de la encargatura del orden de esta población, de 400 habitantes, fue incendiada y baleada el pasado 1 de febrero por un grupo armado, que los comuneros adjudicaron al grupo criminal jalisciense.
A partir de las 5 de la tarde de este miércoles, se avisó a los habitantes de La Cofradía, ubicada a poco más de un kilómetro sobre la presencia del grupo criminal, para que se trasladaran a la iglesia, casas y escuelas.
Dijeron que “conforme a los protocolos de seguridad, se resguardó a la población y la Guardia Comunal ejerció las labores de defensa”.
Una hora más tarde de este 3 de julio, se escucharon detonaciones de armas de alto calibre y explosivos lanzados por drones. Uno de los impactos cayó en la cancha central de La Cofradía que no causó daños mayores porque está techada, pero los ataques continuaron durante horas.
Las autoridades comunales de Ostula exigen a las autoridades federales y estatales sea desmantelado el cártel Jalisco y detenidos sus líderes Cemeí Verdía Zepeda, Agustín Villanueva Ramírez, Leonardo Bravo, alias Gorra Prieta, Vicente Villanueva Ramírez, Silvano Mercado Cervantes, El Quirrin, Guillermo Francisco Cruz, alias Picolin, y Refugio Alcalá, El Cubano.
Manifestaron que las guardias comunales de Ostula, Aquila y Coahuayana harán lo que sea necesario para frenar y combatir a la delincuencia organizada. Piden también a las autoridades federales y estatales sean detenidos y castigados los responsables de los asesinatos de Rolando Zambrano, Eustaquio Alcalá, Juan Medina, Lorenzo Froylán de la Cruz y Antonio Regis, así como la presentación con vida de Antonio Díaz, Ricardo Lagunes y José Gabriel Pelayo.
También exigen acaben con la protección que brindan funcionarios y mandos militares corruptos, así como el respeto a su guardia comunal y el libre ejercicio a su determinación y autonomía.
Cabe señalar que el pasado 1 de julio, en el vecino estado de Colima, fue asesinada la hija de Cemeí Verdia –ex líder de autodefensas de esa región nahua– y acusó a Germán Ramírez, El Toro, quien es ahora el jefe de la policía comunitaria de Ostula de haber sido el autor del homicidio. Germán fue subalterno de Cemeí de 2013 cuando surgieron los grupos de autodefensa, hasta 2015, después se dio el destierro de Verdia a quien acusaron de ser parte del cártel jalisciense.