Chicoloapan, Méx. El desagüe concluyó, pero la tragedia permanece aquí en el fraccionamiento Piedras Negras donde sus residentes literalmente están ahogados entre emociones y sentimientos encontrados. Furia, decepción, coraje, culpa, angustia o tristeza expresan al no saber si recibirán ayuda después de perder su patrimonio, luego de la inundación de más de 500 viviendas ocasionada por la tormenta tropical ‘Chris’ el pasado lunes.

A 48 horas de iniciada la contingencia, finalmente las autoridades federales y estatales, apoyados por cuadrillas de trabajadores del municipio, terminaron de desalojar el agua en su totalidad del interior de las casas, banquetas y calles de esta unidad habitacional de interés social.

Las viviendas más afectadas donde las aguas de drenaje alcanzaron hasta medio metro de altura al interior, también fueron las últimas en ser socorridas. Antes del mediodía de este miércoles, la gente empezó a sacar sus pertenencias echadas a perder.

Con la ayuda de maquinaria pesada y en camiones de volteo, trabajadores de limpia recogían toneladas de muebles y enseres domésticos que se convirtieron en basura al contaminarse de las aguas pestilentes.

Ricardo Arenas vive en el número 143 de la calle Ámbar, quizá la cerrada más afectada por la inundación. Llegó aquí hace 17 años y por segunda vez consecutiva lo perdió todo. En el ciclo pasado, las lluvias inundaron por primera vez su propiedad.

Cuando se le pregunta si la construcción del carril confinado de la línea tres del Mexibús en su ampliación de Chimalhuacán a Chicoloapan tiene que ver con la inundación, él dice no tener la certeza o las pruebas que lo confirmen; pero de algo sí está seguro. “Precisamente, a raíz de la construcción del Mexibús es que empezaron estas inundaciones”.

Como se recordará, en 2023, una tromba inundó las colonias de la parta baja de Chicoloapan y Chimalhuacán, incluido el fraccionamiento Piedras Negras. Aquí, por primera vez, se vio afectado. Incluso, dos estudiantes del Tecnológico de Estudios Superiores de Chimalhuacán (ubicado a espaldas de la unidad) perdieron la vida a consecuencia de la inundación.

En ese entonces, la gente denunció que una obra mal planeada y apresurada del Mexibús fue la responsable de aquella inundación, Hoy, ocurre lo mismo.

El lunes, por segunda vez se inundó la tercera parte de las mil 500 casas de este fraccionamiento y fue hasta la mañana de este miércoles que pudo desalojarse la totalidad de las aguas negras.

“Hoy vamos iniciando la limpieza (del interior de su casa). Gracias al apoyo de algunas personas altruistas, es como estamos logrando sacar lo que eran nuestros muebles y hoy es basura”.

Ricardo Arenas perdió equipo de cómputo, sala, refrigerador, estufa, concina integral y otros muebles. Nada pudo rescatar de la planta baja de su casa, en cuyo interior el agua alcanzó medio metro de altura.

Hasta el momento, ninguna autoridad de los tres niveles de gobierno los ha censado y les para saber el número total de familias afectadas y las pérdidas que dejó la inundación. Lo que prevalece es la incertidumbre, nadie les ha dicho si recibirán apoyos.