Ciudad de México. A un mes del proceso electoral de junio del 2024, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) confió en que “no prevalezca el sentimiento de vencedores o vencidos, sino el de ciudadanos de la misma patria que debemos construir con el talento de todos, sin exclusión".
En tal sentido llamó “a todos los mexicanos, para ir más allá de la contienda electoral y colocarse ahora con ánimo y esperanza, con la conciencia de que el futuro de nuestro país necesita de todos, jóvenes y adultos, sociedad civil y fuerzas armadas, comunicadores y educadores, empresarios y lideres sociales, obreros y campesinos, profesionistas, comerciantes y toda la clase laboral”.
Precisó que hace un mes la ciudadanía dio un ejemplo de civilidad democrática, “tanto los que se sienten representados en los resultados como quienes han expresado otras opciones en las urnas y, especialmente, los que se han hecho cargo de la jornada electoral en cada una de las casillas en todo el país, a quienes debemos expresar nuestra más amplia gratitud”. Subrayó que “muchos ciudadanos podrán sentirse satisfechos, otros, por distintos motivos muy válidos, han vivido los resultados con frustración, pero entre unos y otros debe haber respeto para construir juntos nuestro futuro, unos y otros formamos el mismo país”.
El arzobispo Rogelio Cabrera López, y el obispo Ramón Castro, presidente y secretario general de la CEM, respectivamente, precisaron que “México debe ser tierra de libertad y oportunidades para todos, en un ambiente de justicia y paz que todos anhelamos y añadieron que como obispos de la Iglesia católica “hemos felicitado en su momento a la virtual presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y a quienes han sido elegidos para algún cargo popular.
“No podemos dejar de mencionar el hecho histórico de tener por primera vez a una mujer al frente del Poder Ejecutivo, reconociendo lo que de manera propia puede aportar la mujer a la sociedad. San Juan Pablo II, en su Carta a las Mujeres de 1995, enfatizó el 'genio de la mujer' y su contribución en todos los ámbitos de la vida, incluyendo la política y el liderazgo social, de tal forma que la mayor presencia de la mujer en la sociedad se revela determinante para hacer visibles y superar ciertas formas unilaterales de ver el mundo, para construir una sociedad más inclusiva”.
Exhortaron a que “dirijan sus decisiones y primeras acciones, hacia la construcción de la unidad nacional, la inclusión de todos en el proyecto de nación democrática que tenemos desde hace décadas, hacia el fortalecimiento y autonomía de los tres poderes del Estado con todas sus instituciones, y hacia la vigencia plena del estado de derecho, en el respeto a los derechos humanos fundamentales”.