Guadalajara, Jal. Desde tergiversaciones sobre la autonomía que han permitido a jueces y magistrados convertirse en un “suprapoder incontrolable” que parece usar la ouija para comunicarse con quienes redactaron la Constitución mexicana e interpretarla en su beneficio, hasta señalamientos sobre los “riesgos” que se abrirán en el Poder Judicial con una reforma como la que ha propuesto el Ejecutivo, se dieron en el segundo foro Diálogo Nacional Conformación y Reorganización del Poder Judicial.
El foro se realizó en el Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA) de la Universidad de Guadalajara y reunió a jueces, magistrados, académicos, abogados y políticos tanto de Jalisco como de otros estados de la zona o bien de nivel federal, para discutir y ampliar el proyecto de reformas a 16 artículos y 11 transitorios de la carta magna nacional.
El académico e investigador, constitucionalista y ex presidente del Colegio de Jalisco, Javier Hurtado, dijo que los magistrados de la Suprema Corte de Justicia de la Nación interpretan la Constitución por métodos que quién sabe cuáles sean “porque se comunican con quienes la hicieron”, luego aplican esa interpretación a sus sentencias y después a sentencias en beneficio de ellos mismos, lo que los ha convertido por ejemplo en los funcionarios mejor pagados del mundo y a la vez los más ineficientes.
Propuso que de los 30 candidatos (10 propuestos por el Ejecutivo, 10 por el Legislativo y 10 por el Judicial) que serían votados como ministros, no sea una lista nacional sino tres listas divididas en el mismo número de circunscripciones, para que se permita que lleguen a la SCJN juristas aspirantes de todo el país y no solo quienes residen o son de la capital de la república.
Diputados y diputadas federales del PRI y del PAN participantes en el foro, luego de calificar como un circo y una farsa lo que ocurría con este tipo de encuentros e inconformarse por haber sido llamados de oposición, abandonaron el auditorio del CUCEA.
Antes de eso, la diputada del PRI y ex candidata a gobernadora de Jalisco en alianza con el PAN -quedó en tercer lugar- Laura Haro, pidió a sus compañeros legisladores que “voten en contra de esta reforma” porque, afirmó, no hay manera de transitar hacia un mejor país sometiendo al Poder Judicial a otro poder, en particular “a un poder que ha dejado en claro y manifiesto su visión electorera de la justicia”, pidiendo además que deje de simularse con estos diálogos y cuidando quiénes serán ponentes en los próximos foros.
La ex candidata a gobernadora por Morena y aliados, la diputada federal Claudia Delgadillo, dijo que la reforma debe también tener muy presente la “justicia electoral” porque es urgente el respeto a la voluntad popular, señalando que ella fue víctima el pasado 2 de junio de un fraude electoral, por lo que debe haber garantía que los órganos y tribunales electorales no obedecen a poderes fácticos o políticos como ocurre en Jalisco.
La diputada morenista chinanteca Irma Juan Carlos, recordó que los pueblos originarios son los dueños del territorio y siguen sin ser escuchados, pues además son los que padecen las mayores injusticias, preguntando sin obtener respuesta cuántos indígenas están sin sentencia o de los que han sido sentenciados, cuántos son culpables de verdad.
“La justicia aquí es para los que tienen el dinero, la mayoría de las personas encarceladas son pobres, muchas de ellas de comunidades rurales e indígenas. Esta reforma aunque les duela es necesaria”, sentenció.
Participaron también el senador Ricardo Monreal, el presidente del Supremo Tribunal de Justica del Estado de Jalisco, Daniel Espinosa Licón; el diputado Juan Ramiro Robledo, la investigadora Ana Sofía Torres, el director de la División de Estudios Jurídicos de la UdeG, Carlos Ramiro Ruiz Moreno, el presidente de la barra de abogados de occidente, Juan Alberto Ruvalcaba, entre una docena más de personajes con argumentos a favor o en contra de la reforma.
Al final, magistrados de Jalisco y otros estados, además de federales, abandonaron el CUCEA en un convoy de lujosas Suburban, escoltados por un numeroso grupo de guardaespaldas.
Antes de subir a su vehículo, en breve entrevista con La Jornada (luego que en el foro no fue cuestionado ese tema), Daniel Espinosa Licón, presidente del STJE de Jalisco, dijo que él sí estaría dispuesto a disminuir su sueldo, como propone la reforma para que nadie gane más que el presidente del país, salario que ronda según dijo los 150 mil pesos mensuales.