Edzná, Camp. Durante la inauguración del nuevo museo de sitio de la zona arqueológica de Edzná, la virtual presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo aseguró que la construcción del Tren Maya es sin duda uno de los más grandes legados del presidente Andrés Manuel López Obrador, y adelantó su compromiso de darle continuidad a este sistema ferroviario, tanto en obras complementarias como en la recuperación del patrimonio cultural.

Ante generales que dirigieron la construcción y de directivos de las empresas que colaboraron, ella le ofreció: Presidente, tenga la certeza de que la vamos a cuidar y engrandecer.

López Obrador recibió el cumplido y expresó, una vez más, su satisfacción por la victoria de Sheinbaum en la elección presidencial: Estamos muy contentos. Llevo más de 20 días muy contento, muy fortalecido. Me ayudó. Puede ser que ya no esté tan bien la carrocería, pero tengo un motor nuevo.

La virtual presidenta afirmó, en su oportunidad, que la construcción del Tren Maya es una de las más grandes obras en México y el mundo en la que se conjugan la tecnología de punta, estaciones fundidas con el paisaje, hoteles y áreas naturales protegidas.

Esta gran infraestructura tiene otras grandes enseñanzas. Símbolo de transformación, deja atrás el insostenible modelo neoliberal que tanto daño y sufrimiento dejó al pueblo de México.

En su tercera gira conjunta de trabajo, por la mañana habían tenido una reunión privada con los ingenieros militares que tienen la principal responsabilidad en la etapa final de construcción del Tren Maya, para evaluar los avances. En el acto de inauguración del museo, López Obrador ofreció que en agosto se podrá concluir la última etapa de construcción de esta obra.

A su vez, Sheinbaum recordó que cuando ella era la responsable de la construcción de los segundos pisos en la Ciudad de México, durante la jefatura de gobierno de López Obrador, hubo una comunidad de la colonia Alfonso XIII que se oponía a aquéllos, pues era una obra que atravesaría la colonia con sus precarias viviendas. Ante la disyuntiva, él planteó la edificación de nuevas viviendas y el apoyo a la población con programas sociales.

Cualquier parecido con la construcción del Tren Maya no es mera coincidencia, es la visión de un desarrollo y prosperidad compartida de López Obrador, subrayó quien será su sucesora.

En su mensaje, el presidente hizo un nuevo reconocimiento al papel de los ingenieros militares en la construcción de las grandes obras del sexenio con los aeropuertos Felipe Ángeles y de Tulum, así como el Tren Maya. También lo hizo con ejecutivos de las empresas que colaboraron en este último y también a Daniel Chávez, cabeza del grupo Vidanta, que fungió como supervisor honorario de las obras ferroviarias: un empresario con dimensión social.

Concluido el acto, López Obrador y Sheinbaum, acompañados por empresarios y generales se dirigieron a la estación Edzná del Tren Maya para trasladarse a Mérida, donde hoy continuarán su gira de trabajo, aunque con actos exclusivamente privados.