Morelia, Mich. Una vez que inició el periodo de lluvias a partir de la presencia de la tormenta Alberto, se han beneficiado la mayoría de las presas de Michoacán, alcanzando en promedio 38.4 por ciento de su capacidad.
Se trata de un avance menor, que alcanza entre 3 y 7 por ciento del nivel que presentaban hace unos 10 días, asimismo, el lago de Cuitzeo presenta muy poca recuperación, hay encharcamientos en la parte poniente, mientras que en la zona oriente, tomando en cuenta como punto de referencia la carretera de acceso a la población del mismo nombre que el embalse; cuando ya estaba totalmente seco la parte cercana a la cabecera municipal de Cuitzeo, tiene unos 10 centímetros de profundidad, de acuerdo a los últimos reportes de la Comisión Estatal del Agua y Gestión de Cuencas.
En tanto, el lago de Pátzcuaro se encuentra a 52 por ciento de su capacidad porque la superficie de agua que son parte, principalmente de los municipios de Quiroga y Tzintzuntzan, las afectaciones por la sequía fueron menores, mientras que la correspondiente a Pátzcuaro fue afectada por su baja profundidad, la evaporación, el huachicoleo de agua con pipas y bombas, entre otros factores.
La zona de los muelles General y San Padrito -donde se embarcan lugareños y turismo a Janitzio y Uranden- ha sido siniestrada en decenas de hectáreas y ahora las lluvias comienzan a encharcar la parte que estaba totalmente seca.
En el reporte del 24 de junio de la Comisión Nacional de Agua (Conagua), las presas en su totalidad dentro de la región Lerma-Pacifico presentan un almacenamiento total de 38.4 por ciento, lo que aún se considera un porcentaje bajo ante esta temporada del año.
La presa de Cointzio, que abastece de agua potable a Morelia, se encuentra en 25 por ciento de su almacenamiento, mientras que la de Infiernillo está a 45 por ciento y Francisco J. Mujica en 32, y son las tres presas más importantes para el estado.
El secretario de Medio Ambiente de la entidad, Alejandro Méndez López, señaló que se esperan más lluvias en esta temporada para que las presas aumenten su almacenamiento, porque ha sido escasa la cantidad de agua que han traído las recientes lluvias.