Puebla, Pue. Familiares de los campesinos Jorge y Alberto Cortina Vázquez, asesinados por elementos de la Fuerza Cívica de Veracruz durante la represión para desalojar un plantón instalado por agricultores y ejidatarios frente a la empresa Granjas Carroll, en la comunidad de Totalco, municipio de Perote, exigieron justicia y el retiro de la criadora de cerdos de la Cuenca Libre Oriental.
“¡El asesinato es responsabilidad del Estado pero también de Granjas Carroll! Nosotros no estaremos tranquilos hasta que haya castigo para los que los ejecutaron y que se vaya la compañía que nos ha estado asesinando poco a poco y que, ahora de tajo, terminó con la vida de Jorge y Alberto”, reclamaron durante el velorio, al que asistieron cientos de lugareños.
En entrevista con La Jornada de Oriente, los parientes de Jorge y Alberto demandaron castigo a los responsables intelectuales y materiales del homicidio de los hermanos, que dejaron a seis huérfanos en total, cada uno padre de tres hijos, ninguno mayor a los nueve años.
La atmósfera gris por el cielo nublado y el rito luctuoso contrastó con el colorido de los trajes y atuendos de sus compañeros de Cuadrilla, Gracejos que se hacen llamar “Los Cachines”, quienes los despidieron en medio de danzas que realizaron a unos metros de los ataúdes.
Los hermanos de 37 y 29 años fueron vestidos con el hábito de San Judas Tadeo, su tía María de los Ángeles Cortina, explicó que se decidió hacerlo así por la práctica religiosa de ambos jóvenes, ambos asistían en bicicleta a cada peregrinación de las diferentes vírgenes y santos en el país.
“Esa era la única afición de mis sobrinos, se iban cada año a ver a la virgen de Juquila, a la de Guadalupe. Ellos no tomaban, no fumaban. Me dijeron que antes de morir, el mayor de mis sobrinos le dijo a alguien, vean por mis padres, vean por mis hijos, por favor no les desamparen”, relató entre llantos.
La familia de Jorge y Alberto Cortina Vázquez, dedicada a “picar piedra” y que también ha protestado por la instalación de la empresa Granjas Carroll desde 2007, explicó que el tractor que tenían era una de sus posesiones preciadas, pues no sólo lo usaban en sus tareas en la agricultura sino que los ocupaban en festivales y desfiles, subiendo a los niños en el vehículo que adornaban con flores y listones de colores. En Navidad, le adornaban con luces.
Narraron que el tractor fue usado en el plantón de Granjas Carroll y cuando la policía llegó disparando al aire, con gases lacrimógenos trataron de quitar el vehículo para ponerle a salvo; fue entonces cuando los agentes dispararon primero a las llantas y luego los alcanzaron y les obligaron a bajar. Después de eso los encontraron ensangrentados por los disparos hechos a quema ropa.
Gabriela, una de las viudas, confirmó que los cuerpos de ambos presentaban varios disparos en todo el cuerpo. “Queremos justicia, es lo único que buscamos, que se castigue a los responsables de haberlos acribillado y a quien dio la orden de ese operativo”, reclamó.
Los hermanos activistas, integrantes del Movimiento en Defensa del Agua en la Cuenca Libres Oriental así como pobladores de Totalco, son considerados como héroes en su poblado, asesinados en la lucha porque se vaya una empresa que contamina la región y acapara el agua, dejando sin el suministro a los lugareños.