Chilpancingo, Gro. Esta mañana arribó a la capital una delegación de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, con la finalidad de conocer los avances del caso del estudiante de la Normal de Ayotzinapa, Yanqui Khotan Gómez Peralta, ejecutado por la policía estatal el pasado 7 de marzo.

La comitiva de la ONU, encabezada por Denise González Núñez, fue recibida en la Casa del Peregrino por la mamá del normalista asesinado, Lilia Vianey Gómez, y el director del Centro Minerva Bello, José Filiberto Velázquez Florencio, con los que posteriormente se reunieron en privado.

Lilia Vianey Gómez señaló que espera que “haya justicia, es lo que pido para mi hijo, porque yo conocía a mi hijo; no era malo, era buena gente, él apoyaba a la gente que le pedía apoyo, y veía el medio, de las becas que le daban en la escuela, ayuda a quien le pedía apoyo, por eso esperamos que haya justicia”.

Agradeció que desde el Alto Comisionado “estén interesados en el caso de mi hijo, y espero en Dios que lo sigan llevando hasta el final para que se tenga justicia”.

Por otra parte, el sacerdote Velázquez Florencio también recordó que “la Oficina del Alto Comisionado, desde el principio han estado en contacto, a distancia, y hoy es la primera vez que vienen a Guerrero, a escuchar y a hablar de este caso”.

Mencionó que los representantes de la ONU sostendrán una reunión con los familiares de Yanqui Khotan “y más tarde visitarán la Fiscalía General de la República(FGR), y se reunirán con el fiscal que lleva el caso del joven normalista; para nosotros es importante que este organismo internacional tenga puestos los ojos (en el caso), antes de ir a otra instancia; y que observen si el Estado mexicano hizo bien o no su trabajo”.

Manifestó que en el próximo mes de agosto “en la etapa intermedia, se van a desahogar las pruebas de los dos primeros policías, y en septiembre será el tercer policía que se había escapado, para tener ya una sentencia favorable lo más pronto posible”.

Reconoció que es importante que la FGR haya atraído el caso: “ los policías no han declarado, ya que han hecho valer su derecho a no decir nada, aunque su defensa argumenta lo mismo que han dicho, en el sentido de que ellos (los policías), repelieron una agresión, pero no hay ningún motivo jurídico que pueda demostrarlo”.

Dijo que hay preocupación “por los vicios que quedaron de la Fiscalía del Estado, en las pruebas periciales que estuvieron amañadas, y queremos que esos peritos sean sancionados por haber falseado los peritajes”.

Por otro lado, el presbítero afirmó que hasta ahora “hay asuntos pendientes en el sentido de sancionar a los mandos policíacos que estuvieron al tanto del caso; “ellos dicen (la Secretaría de Seguridad Pública estatal), que sí hay una investigación, y hoy retomaremos ese asunto”.

La misma FGR “ ha alegado la falsedad de peritajes que hizo la fiscalía estatal; queremos concentrarnos en lo que es la parte penal, básicamente lo que tiene que ver con los perpetradores; sabemos que la policía estatal está totalmente descompuesta, y mientras se deje el trabajo de seguridad pública a la Guardia Nacional, que al final es ineficiente, no vamos a ver que esto cambie como son los hechos de violencia en Chichihualco y Acapulco, que muestran la ineficiencia de la policía estatal”, concluyó.