Buenos Aires. A unos días de la brutal represión contra las columnas de manifestaciones pacíficas, que intentaban llegar al Congreso, para protestar contra la Ley Bases que se debatía en el Senado, rechazada por millones de argentinos, 16 personas continúan detenidas en cárceles de alta seguridad, entre ellas estudiantes universitarios y una nieta de desaparecidos.
Los detenidos fueron mantenidos en prisión ilegal durante 48 horas acusados de “terroristas”, mientras se conoció que en las últimas horas el gobierno habría autorizado el “ciberpatrullaje en Internet” por lo que se podrán detener personas por “publicaciones sospechosas”.
En política exterior, el presidente ultraderechista Javier Milei, firmó acuerdos con su par ucranio Volodymir Zelensky, que involucran al país en la guerra, ofreció incluso enviar aviones de la Fuerza Aérea Argentina y todo tipo de ayuda, además de rechazar la propuesta rusa de paz, al comprometer a Buenos Aires en temas graves relaciones internacionales en forma ilegal sin autorización del Congreso, violando la Constitución. También fue la voz dispar con gobernantes de América Latina que asistieron a la Cumbre del G-7.
Por su parte, el periodista e investigador Raúl Kollman, de Página /12, escribió sobre los “infiltrados” que protagonizaron un ataque contra los policías durante las marchas pacíficas que intentaron llegar al Congreso el miércoles pasado, lo que movilizó a las cinco fuerzas de seguridad, y además de la represion que dejó una cantidad de víctimas fueron detenidas 35 personas, de las cuales 16 permanecen presas. “Entre los detenidos no figura ninguno de los individuos encapuchados que protagonizaron los hechos más violentos de la jornada del miércoles pasado”, sostiene Kollman .
Los jefes policiales no han podido responder sobre “los que se ensañaron durante cinco minutos con un auto de la señal de noticias de Córdoba Cadena 13 hasta prenderlo fuego, una postal con el Congreso de fondo que parecía diseñada para viralizarse”, sostiene el periodista que se refiere a Orlando Morales “un histórico cronista de Cadena 3” de Cordoba que estaba en el auto cuando fue atacado y quien identificó perfectamente que los autores del ataque fueron gente inflitrada”.
Los detenidos en tanto son acusados de “incitar la violencia colectiva en contra de las instituciones, imponer sus ideas o combatir las ajenas por la fuerza o el temor, infundiendo un temor público y suscitando tumultos o desórdenes. A la vez de erigirse en un posible alzamiento contra el orden constitucional y la vida democrática”. Esto se hizo de acuerdo al pedido de prisión preventiva que firmó (el gobierno) para el fiscal Carlos Stornelli.
Kollman advierte que “el papel de (la ministra de Seguridad, Patricia) Bullrich y la Policía Federal, el ataque a los diputados para preparar el terreno, la absurda inacción de los uniformados ante el incendio del auto, los dos hombres que participaron del hecho y no fueron molestados, el “terrorista” que fue recibido con abrazos por los represores, son hechos que están registrados en una cantidad filmaciones”.
También se registró todo lo denunciado por el reportero y cronista Orlando Morales, donde se ve a “dos hombres que terminaron de vandalizar su automóvil que incendiaron y se fueron tranquilamente en un viejo vehículo con la patente NBO 056 dada vuelta. La patente es trucha (falsa) no existe”.
Con todos estos datos preparan los abogados de distintos organismos la presentación ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que ha iniciado una investigación sobre violaciones a los derechos humanos, a la libertad de expreisón y otros bajo el gobierno de Milei.