Buenos Aires. La inflación volvió a moderarse en mayo en Argentina y se ubicó en 4.2 por ciento, la más baja para un mes en dos años y medio, aunque economistas advierten que esta cifra positiva responde principalmente a la caída del consumo.
La subida de precios en 12 meses, además, sigue rozando el 280 por ciento, uno de los niveles más altos del mundo.
El 4.2 por ciento del índice de precios al consumo de mayo, publicado el jueves por el Instituto Nacional de Estadística (Indec), es el dato más bajo desde enero de 2022, cuando se ubicó en 3.9 por ciento.
Es una evolución que satisface al gobierno del ultraliberal Javier Milei, quien asumió en diciembre con una inflación de 25.47 por ciento, producto de la herencia del anterior gobierno de centroizquierda de Alberto Fernández (2019-2023) y de sus primeras medidas de ajuste, que incluyeron una devaluación del peso de 54 por ciento y una desregulación de las tarifas de servicios que disparó el índice de precios.
Después de la explosión inflacionaria a 25.5 por ciento en diciembre, impulsada por la fuerte devaluación del peso tras el cambio de gobierno ese mes, la cifra se moderó a 20.6 por ciento en enero; 13.2 por ciento en febrero, 11 por ciento en marzo y 8.8 por ciento en abril.
“Con el dato de mayo, se profundizó el proceso de desinflación en curso”, celebró en sus redes el ministro de Economía, Luis Caputo.
“La dinámica de precios volvió a ubicarse por debajo de lo esperado por el consenso de los analistas participantes en el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del BCRA (Banco Central de la República Argentina)”, agregó el funcionario en referencia al estudio del cual participan las principales consultoras económicas del país.
De todas formas, a pesar de cinco meses en caída, la inflación en la tercera economía más grande de América Latina alcanzó 71.9 por ciento en los primeros cinco meses de 2024 y 276.4 por ciento en doce meses, niveles inéditos en tres décadas.
Sin embargo, la inflación anual cayó por primera vez en muchos meses: 276.4 por ciento frente a 289.4 por ciento de abril.
En mayo, los rubros que impulsaron el índice fueron principalmente comunicación, con un aumento de 8.2 por ciento y educación con 7.6 por ciento.
Caída del consumo y contracción de la economía
Mientras Milei atribuye la desaceleración de la inflación al recorte de gastos y al freno de mano a la emisión monetaria, analistas y opositores advierten que obedece a una brusca caída de la actividad económica y del consumo a niveles similares a la devastadora crisis de principios de siglo.
El Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), también publicado por el Indec, reveló que el primer trimestre del año la economía se contrajo 5.3 por ciento.
En tanto que las ventas minoristas retrocedieron 7.3 por ciento anual en mayo y acumulan una caída de 16.2 por ciento en los primeros cinco meses del año, de acuerdo con un reporte de Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
“La caída sensible del consumo explica la reducción de la tasa de inflación desde diciembre para acá, en buena medida”, señaló a la AFP el economista Hernán Letcher, director del Centro de Economía Política Argentina (CEPA).
“Las consultoras percibimos que el proceso de reducción de la tasa de inflación no continuaría en junio. El relevamiento de expectativa de mercado da cuenta de que el nivel del orden de 5 por ciento (mensual) se mantendría incluso hasta finales de año”, afirmó.
La economía argentina se contraerá 2.8 por ciento este año, según el Fondo Monetario Internacional, después de haber decrecido 1.6 por ciento en 2023.
El gobierno, en el inicio de la semana, señaló que ya hay una recuperación, o casi, con un aumento de 16 por ciento del salario real en el sector privado en abril: la recuperación del poder adquisitivo es “la más significativa desde 2009”, pregonó la Presidencia.
La cifra se relativiza, sin embargo, en un país donde el empleo informal representa más de 45 por ciento de la población económicamente activa, según los últimos números oficiales de finales de 2023, incluso antes del impacto de las medidas de austeridad de Milei.
Negando una recuperación, la oposición y los movimientos sociales denuncian una crisis, con la pobreza aumentando a un ritmo acelerado desde finales de 2023: a 55.5 por ciento de la población en el primer trimestre de 2024, frente al 44.7 por ciento del año pasado, según el Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica (ODSA-UCA).
El índice de inflación se da a conocer horas después de que el Senado votara con modificaciones un paquete de reformas de Milei, en una maratónica sesión que estuvo marcada por disturbios frente al Congreso con una veintena de heridos y detenidos, además de autos incendiados.