Ciudad de México. El presidente Andrés Manuel López Obrador enfatizó que urge
la reforma al Poder Judicial y confió en que con la conformación del nuevo Congreso de la Unión podría estar aprobada en septiembre.
El Poder Judicial está secuestrado, tanto por la delincuencia organizada como por la de cuello blanco; y no está al servicio del pueblo. Jueces, magistrados, ministros no imparten justicia. Hay, desde luego, honrosas excepciones, no podemos, así, generalizar, hay jueces buenos, ministros, magistrados, pero, en general, está mal el Poder Judicial. Necesitamos esa reforma.
En repuesta a cuestionamientos al respecto, indicó que desde ya (la Comisión Permanente) puede convocar a los debates para su discusión –como se lo planteó la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum, durante la reunión que tuvieron el lunes– con el fin de que en la próxima legislatura pueda avalarse.
Yo creo que podría hacerlo el nuevo Congreso
, señaló el mandatario en la mañanera de ayer. En septiembre, es el mes de la patria (...) podría hacerse
, agregó.
Le pregunto a la gente: ¿Vamos a revisar el caso? ¿Vamos a que se opine? El que nada debe, nada teme. Que la gente participe y que se lleve tiempo, ya desde ahora empiecen a organizar foros, ojalá lo pueda hacer el Congreso; que se escuche a todos, a los de arriba y a todos los ciudadanos
.
Para subrayar la relevancia de la reforma, el tabasqueño aprovechó dos casos presentados previamente, en la sección Cero Impunidad de la mañanera, por el subsecretario de Seguridad Pública, Luis Rodríguez Bucio.
Se trata de las decisiones que por separado tuvieron los jueces José Fernando García Quiroz y Hortensia García Rodríguez, quienes negaron la extradición del narcotraficante Rafael Caro Quintero, el primero; del ex gobernador César Duarte Jáquez, la jueza. Ambos son reclamados en Estados Unidos para juzgarlos por diversos delitos.
Sin embargo, remarcó que quienes se oponen a esta reforma son los sectores que han sido beneficiados por la corrupción, por lo que advirtió: “ya están actuando los que no quieren la reforma, están ya moviéndose, como siempre lo hacen, nada más que, como se dice en el béisbol, los tengo bien fildeados, o sea, ya sé que no les gusta, porque son 20 paquetes de reforma y ésta es la que les da salpullido”.
Aseguró que esta propuesta ha generado nerviosismo en los mercados, lo que ha llevado a que el llamado superpeso pierda terreno frente al dólar.
“¡Ah! Para que no haya nerviosismo en el mercado financiero ¿voy a ser cómplice de la corrupción del Poder Judicial, vamos todos a ser cómplices y decir: ‘Que quede así, no le mueva’, porque nos va a afectar en nuestra moneda?”, cuestionó.
Y ante ello destacó que aun cuando la mañana de ayer se había colocado en 18.45 por cada divisa estadunidense, en su sexenio la moneda nacional no se ha devaluado, sino se ha fortalecido.
El tabasqueño presentó el balance de los sexenios neoliberales. De acuerdo con las cifras, con Miguel de la Madrid el peso se devaluó 4 mil 482 por ciento; con Carlos Salinas de Gortari, perdió 47 por ciento; con Ernesto Zedillo, 187 por ciento; con Vicente Fox, 21 por ciento; con Felipe Calderón la devaluación fue de 26.8 por ciento, y con Enrique Peña Nieto alcanzó 56 por ciento.
En cambio, con nosotros no se ha depreciado el peso, se ha fortalecido, 10 por ciento
a la alza en lo que va del sexenio.