Dubai. Los rebeldes de Yemen afirmaron el lunes que habían desmantelado una “red de espionaje”, después de haber detenido la semana pasada a más de una decena de empleados de organizaciones internacionales.
“Una red de espionaje israelo-estadunidense fue detenida", declararon los rebeldes hutíes en un comunicado publicado por su organismo de seguridad, y precisaron que los detenidos trabajaban bajo "el amparo de organizaciones internacionales y agencias de la ONU".
La ONU afirmó el viernes que 11 de sus empleados locales fueron detenidos en regiones de Yemen controladas por los insurgentes proiraníes.
Seis de ellos trabajan para el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos y los otros cinco para cinco agencias diferentes: la Unesco, Unicef, el Programa Mundial de Alimentos, el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo y la oficina del enviado especial de la ONU para Yemen.
La organización yemení de defensa de los derechos humanos Mayyun dio cuenta por su parte de la detención "simultánea" de 18 empleados de organizaciones humanitarias.
El comunicado publicado por los hutíes no menciona el número de personas detenidas y afirma simplemente que la "red" estaba vinculada a la CIA.
Según la misma fuente, la red llevaba a cabo actividades de "espionaje" desde hace años, primero bajo el amparo de la embajada de Estados Unidos, antes de su salida de la capital Saná en 2015.
Los rebeldes se habían apoderado de Saná unos meses antes, lo que provocó la intervención de una coalición militar dirigida por Arabia Saudita en apoyo al gobierno reconocido por la comunidad internacional.
La guerra en Yemen causó cientos de miles de muertos y hundió al país, el más pobre de la península arábiga, en una de las peores crisis humanitarias en el mundo.
Desde noviembre, los hutíes lanzan ataques frente a la costa de Yemen contra barcos vinculados, según ellos, a Israel, Estados Unidos o Reino Unido, y afirman que actúan en solidaridad con los palestinos de la Franja de Gaza, escenario de una guerra entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamas.
Los rebeldes hutíes ya afirmaron en mayo que habían desmantelado una "red de espionaje". Su agencia de prensa difundió en ese momento imágenes que mostraban a al menos 18 personas.