Ciudad de México. La Iglesia Católica presentó diez peticiones a Claudia Sheinbaum Pardo, virtual presidenta electa de México, y confió en que el proceso de transición se logre con la mayor eficacia, sin violencia y que abra las puertas a la reconciliación nacional.
Estos planteamientos “consideramos importantes para la toma de estas primeras decisiones de la virtual ganadora de las elecciones presidenciales, encaminados a la búsqueda del bien común y la promoción de una sociedad más justa y humana”, señaló la Arquidiócesis Primada de México en el editorial del semanario Desde la fe.
Los puntos planteados son respeto, para que “desde el gobierno se respete la dignidad de toda persona, sin discriminación alguna, y se garanticen los derechos fundamentales de los ciudadanos”; el diálogo, “que el nuevo gobierno cultive un espíritu de diálogo abierto y constructivo con todos los sectores de la sociedad, escuchando atentamente las diversas voces”.
También planteó que se proteja y promueva la libertad religiosa; la defensa del buen común, a fin de que éste se anteponga al interés particular; la escucha, que el gobierno esté atento a las necesidades y preocupaciones de los ciudadanos, especialmente de los más vulnerables y atención a los más vulnerables.
Otros puntos son dar valor a la vida, que se “defienda y promueva el valor de la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural, rechazando toda forma de atentado contra ella”; ecología y medio ambiente; luchar por la paz, es decir, el fin de la violencia criminal es algo prioritario y recordó la promesa de analizar y aplicar los puntos de la firma del Compromiso por la paz e integrarlos en su agenda de gobierno; y finalmente pidió liderazgo ético, “que ejerza su cargo con integridad, honestidad y transparencia”.